Recientemente se dio a conocer que las autoridades alemanas abandonaron la investigación sobre una violación cometida por un estudiante de origen afgano de 10 años de edad.
El agresor realizó el crimen a mediados de agosto con la ayuda de dos cómplices de 11 años, mientras se encontraban en un paseo escolar en el Castillo de Krochlendorff en Brandeburgo.
De acuerdo con el medio Berliner Zeitung, durante la excursión, el pequeño inmigrante junto a sus dos amigos, también de origen extranjero —uno afgano y otro sirio—, rodearon a un compañero y lo amenazaron, diciéndole:
¡Hoy te vamos a violar!«.
Y como escena de película de terror, los dos alumnos de 11 años sujetaron al pequeño mientras el de 10 abusaba sexualmente de él.
El caso se dio a conocer días más tarde, cuando uno de los amigos de la vícima relató lo sucedido a untrabajador social del colegio.
A su vez, la escuela notificó inmediatamente a los padres y a la Policía. Como ‘castigo’ los responsables fueron expulsados.
Increíblemente, el caso fue cerrado para las autoridades debido a que ninguno de los involucrados ha alcanzado los 14 años, la edad mínima para ser imputadosegún el sistema judicial germano.
Las autoridades educativas aseguran que incluso antes del hecho el agresor ya había sido sancionado por conducta violenta contra sus compañeros.