El Ferrari 250 GTO ya es el coche a subasta más caro del mundo

Quién ha comprado el coche más caro del mundo? Esa es la gran pregunta que todo el mundo se está haciendo después de que este fin de semana se haya llevado a cabo la puja más alta de todos los tiempos en una subasta para comprar un automóvil. Nada se sabe del anónimo comprador, quien desembolsó la friolera de 41,6 millones de euros para comprar una joya del automvilismo: un Ferrari 250 GTO de 1962.

La venta ha sido realizada por la casa de subastas Sotheby’s y tuvo lugar durante la Monterrey Car Week celebrada este fin de semana. Y es que este vehículo del ‘cavallino rampante’ no es un automóvil más, sino una de las piezas más exclusivas que se pueden encontrar en el mercado: el fabricante italiano tan solo fabricó 36 unidades de este modelo pero, además, este es uno de los cuatro con personalización exclusiva.

Y es que la mítica empresa Carrozzeria Scaglietti se quedó con cuatro de estos vehículos y los personalizó a gusto de sus dueños. Y este Ferrari 250 GTO fue uno de ellos: en concreto, contaba con un chasis más ancho y corto de lo normal, un mayor ángulo de inclinación del parabrisas, llantas más grandes y un motor instalado varios centímetros más bajo de lo que era habitual en este modelo.

Allá por los años sesenta, este vehículo fue pilotado por Phil Hill en veinte carreras, de las que ganó dos.

Tras pasar por las manos de varios dueños, su último propietario se hizo con el vehículo en el año 2000. Se trataba de Greg Whitten, un extrabajador de Microsoft que hizo fortuna después de ser el encargado de poner los cimientos a Basic, el primer gran prodcuto de la compañía y el primer gran lenguaje de programación.