Los manjares del caribe

El Caribe es más que Sol y playas espectaculares. La gastronomía de la región es una caja de sorpresas que impacta los paladares con platos como el “mofongo” en Puerto Rico, “ackee con bacalao” en Jamaica y el “Calaloo” de Trinidad y Tobago.

La fusión de culturas entre lo indígena, europeo y la aportación africana ha resultado en una cocina caribeña variada en la que nunca faltan los frijoles y el arroz combinados con carnes y una buena oferta de pescados de sus cálidas aguas.

Una de las referencias de la cocina caribeña a nivel internacional es José Santaella, que desde su restaurante del mismo nombre en la capital puertorriqueña marca la pauta en un local que ha recibo a un buen puñado de actores de Hollywood que rodaron en la isla o a la mediática pareja formada por Isabel Preysler y el escritor peruano Mario Vargas Llosa, entre muchos otros. Santaella señaló que a pesar de que pueda haber cierta base en la gastronomía regional las variedades por áreas e islas son indudables.

El cocinero dijo que comenzando por Puerto Rico uno de los platos más típicos es el sancocho, una sopa espesa con plátano verde, yuca, yautia, ñame, batata, papa, además de carne, que puede ser de pollo, cerdo o res.

A este contundente plato se le puede añadir chorizo, pescado y legumbres, a lo que una vez servido se acompaña normalmente con arroz blanco.

Santaella cuenta que quien viaje hasta Puerto Rico no puede marcharse sin probar el Mofongo, un pastel cocinado con plátano verde frito machacado al que se añade ajo, aceite y carne.

Este sólido pastel se rellena de pollo, carne, camarón o langosta, un plato para el que es bueno sentarse en la mesa con hambre. “La cocina puertorriqueña es en realidad de invierno”, asegura el cocinero, para quien no andan a la par el clima y la gastronomía local, en la que predominan ingredientes pesados que bien se podrían utilizar en lugares fríos en los que se necesitan muchas calorías para combatir las bajas temperaturas.

“En el Caribe las cocinas y platos varían mucho con independencia del lugar”, apunta, tras matizar que en esta región la gastronomía es el resultado de una fusión entre lo europeo y africano, sin dejar de lado la influencia de lo indígena.