La pequeña zona arqueológica llamada Tres Cerritos es llamada así por la apariencia que tenían las tres principales estructuras arquitectónicas antes de ser exploradas.
ADMIRA EL SOL, LAS FORMACIONES ROCOSAS Y EL LAGO AL DESCUBIERTO
Inicia tu recorrido disfrutando del aire y el sol mientras recorres el camino que te lleva a conocer la cultura prehispánica de los antiguos pueblos asentados en torno al lago. Una vez en el sitio, siente la placidez de caminar en un terreno rústico, y explora con todos tus sentidos estas formaciones antiguas.
RECORRE EL CONJUNTO ARQUEOLÓGICO
Experimenta la grata sensación de pasear tranquilamente por el sitio mientras admiras las plataformas, plazas, adoratorios y el basamento del templo, todos pertenecientes al periodo clásico. Remóntate al pasado lejano y visualiza a los nativos de épocas prehispánicas en sus ritos, fiestas y ceremonias. El primer montículo te mostrará tres plataformas cuadrangulares que recuerdan la forma de construir en Mesoamérica.
Asómbrate con los montículos dos y tres que en su época de esplendor contenían cámaras mortuorias orientadas hacia los puntos cardinales. Sorpréndete al conocer que los objetos encontrados en el sitio guardan una relación que debió existir con la cultura teotihuacana.
Termina tu recorrido contemplando el majestuoso Lago de Cuitzeo en el horizonte, testigo silencioso de culturas antiguas que se establecieron en estas tierras.