Elecciones no afectarán el flujo de participaciones hacia San Luis Potosí

  • El desarrollo de las campañas electorales, no tienen por qué influir en otros ámbitos, son cosas muy diferentes, tampoco prevemos que pueda darse una contracción en el flujo, o en el gasto público. Afirmó José Luis Ugalde

El Secretario de Finanzas del Gobierno del Estado, José Luis Ugalde Montes, aseguró que no hay indicios de que el proceso electoral o la eventual transición en el gobierno federal, pueda tener como consecuencia, una afectación negativa en el flujo de participaciones hacia San Luis Potosí.
En entrevista, aseguró que incluso, el flujo de recursos públicos federales, en el primer trimestre de 2018, ha sido positivo. “El desarrollo de las campañas electorales, no tienen por qué influir en otros ámbitos, son cosas muy diferentes, tampoco prevemos que pueda darse una contracción en el flujo, o en el gasto público, está dada una calendarización y se avanza conforme a la aplicación del presupuesto”, agregó.
Además, Ugalde Montes, sostuvo que aún, tras la jornada electoral, y con un presidente de la República electo, no habría razones por las que temer a que pudiese darse una contracción, ni siquiera durante la curva de aprendizaje inherente al inicio de cualquier administración pública.
Puntualizó que esto ocurre porque el aspecto presupuestal está muy bien organizado, se hace con base a una elaboración, un documento, y una planeación específica que no tiene razones, por las que debe alterarse, no hemos detectado ninguna variación, el flujo de las participaciones se ha dado conforme a lo programado, y tenemos la confianza de que seguirá de esa manera.
Destacó que las participaciones y aportaciones federales, a entidades federativas, son canalizadas a través de los ramos generales 28 y 33, su asignación está etiquetada desde la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación de cada año.
Además, la asignación presupuestal para el 2019, además, quedaría garantizada desde la elaboración del presupuesto federal, cuyos trabajos son desahogados en los meses de agosto y septiembre, previo a su autorización por el Congreso federal.