- Fueron baleados por dos sujetos abordo de una motocicleta;
uno de ellos fue capturado, el otro se dió a la fuga
Dos hombres, al parecer padre e hijo, fueron baleados por uno de dos sujetos quienes viajaban a bordo de una motocicleta, uno de los cuales finalmente fue capturado, el otro logró darse a la fuga.
Según datos recabados, los hechos ocurrieron en la colonia Centenario, por la mañana y la captura del presunto en el fraccionamiento El paseo.
En una vivienda ubicada en la calle Espinosa y Cuevas, casi esquina con Anastasio Parrodi, ocurrieron los hechos, en la mencionada agencia de reparación de bicicletas estaban Marco S. M., quien cuenta con 53 años de edad y Juan Manuel S. M., de 21, al parecer padre e hijo, cuando de pronto llegaron dos sujetos a bordo de una motocicleta roja, uno de los tipos vestía de negro.
Uno de los tipos sacó una pistola con la cual abrió fuego en contra de la pareja, logró hacer blanco en los dos, luego de inmediato emprendieron la veloz huida, cerca del lugar se encuentra una base de la Policía Estatal y en cuestión de segundos los agentes llegaron al lugar y les señalaron a los presuntos cuando iban en fuga, se inició así una persecución por las calles aledañas.
Los presuntos enfilaron con rumbo a la calle La Lonja, al llegar al puente de Nicolás Romero y Río Españita, tomaron por la rampa descendente al Río Españita, se fueron en contra y los agentes también se fueron por la misma vialidad.
Lograron atrapar a uno de los presuntos, en las inmediaciones de la calle Julio Peña, a un costado de la antigua Central Camionera, según trascendió.
Al parecer el sospechoso fue llevado de nuevo al lugar donde ocurrieron los hechos, pues una mujer, acompañada por una niña se acercó a la patrulla y lanzó amenazas de muerte contra el tipo que estaba a bordo del vehículo policial.
Al lugar del atentado acudieron dos ambulancias y a bordo de la 187, fue llevado al Hospital Central Marco S. M., Juan Manuel perdió la vida en el lugar, ahí se presentaron agentes ministeriales para iniciar el procesamiento de la escena del crimen.
En la revisión del lugar, se encontraron ocho cartuchos percutidos calibre nueve milímetros, los cuales fueron embalados como indicios de probable evidencia.