No hay partidos corruptos, sino políticos corruptos: Meade

El candidato presidencial de la coalición PRI, PVEM, Panal, José Antonio Meade defendió al PRI de los escándalos de corrupción de sus integrantes (ex gobernadores), al señalar que no hay partidos corruptos, sino políticos corruptos que deben estar en la cárcel.

«No hay partidos corruptos, hay políticos corruptos y creo que vale la pena distinguirlo… porque México lo que necesita es que los malos políticos, del partido que fueran, estén enfrentando las consecuencias dentro de la cárcel, eso es lo que nosotros hemos plateado».  Al participar en la 101 Asamblea General de la American Chamber México, Meade Kuribreña fue cuestionado por los integrantes de este organismo, pero sobre todo del porqué aceptó ser abanderado presidencial de un partido corrupto.

Meade destacó que en sus 20 años de trayectoria en la administración pública, ha sido un servidor público honesto, que no ha estado involucrado en ningún escándalo. »Pero a México no le sirven las etiquetas, en términos de partidos buenos o malos, le sirve el deslinde de responsabilidades de político honestos y de políticos que no lo son», dijo.

Algunos insisten en mandar a las instituciones “al carajo”: Meade

El candidato presidencial de la coalición PRI, PVEM, Panal, José Antonio Meade, criticó al aspirante presidencial de Morena, Andrés Manuel López Obrador, quien en la elección del 2006 mandó al diablo a las instituciones.  “Hace décadas los mexicanos decidimos dejar atrás la época de los caudillos para convertirnos en un país de instituciones. “Lamentablemente, algunos insisten en mandarlas al carajo. No lo comparto. Nuestras leyes e instituciones deben ser cumplidas y respetadas. #YoMero”, escribió el aspirante presidencial en su cuenta de Twitter.

En Jalisco, Andrés Manuel López Obrador aseguró que no se declarará ganador, sino hasta que el INE de los resultados de la elección presidencial del 1 de julio y dio su voto de confianza a la autoridad electoral para que no haya fraude en los comicios, ni conflictos postelectorales.