El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI es quien opera la precampaña y manejará la campaña de Mikel Arriola, debido a que este instituto político ha estado olvidado en los últimos dos sexenios y sólo cuenta con una única estructura, la de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, a quien a todas luces no le quieren dejar las riendas del tricolor en la capital.
Así lo deja ver en entrevista con un Diario de circulación nacional Francisco Olvera Ruiz, delegado con funciones de presidente, quien el 18 de diciembre fue designado en el cargo por Enrique Ochoa Reza.
El primer paso ya lo está haciendo el Comité Ejecutivo Nacional. Aquí había un círculo negativo, el PRI de la Ciudad de México no se activaba porque faltaba atención del CEN y como era un partido poco activo, el CEN no le daba la atención”, sostiene.
Para Olvera Ruiz, lo que está haciendo el presidente de ese instituto político, Enrique Ochoa, es ponerle toda la atención al partido en la capital, “primero con la presencia de Eruviel Ávila y luego con un servidor, sin que esto sea una garantía de avance, porque la garantía es sólo el trabajo, pero es una buena señal que en dos ocasiones se haya mandado a un exgobernador a hacerse cargo de la Ciudad de México”, detalla quien fuera gobernador de Hidalgo.
1’250,000 votos esperan, los más optimistas, el próximo 1 de julio
Mikel Arriola, precandidato del mismo partido a la jefatura de gobierno, coincide con Olvera Ruiz al señalar a este diario que es el CEN de su partido quien hasta el momento coordina las acciones políticas en la Ciudad de México, ya que por varios años estuvo olvidado este instituto político en la capital.
Aunque asegura tener gran cercanía con el presidente del partido, Arriola apunta que tiene la obligación como precandidato en la ciudad de aglutinar a los actores del PRI que han sido actores por muchos años y generar redes ciudadanas.
Mi apuesta es ciudadana, yo soy un candidato ciudadano, yo no soy militante, yo aproveché la apertura del PRI para ocupar candidaturas ciudadanas y competir y ahora soy precandidato y esa es una de las tareas mías, aglutinar esfuerzos para enfrentar el gran reto territorial que va a significar la elección”, expone.
Sin miramientos, Fernando Lerdo de Tejada, ex vocero del expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León, opina que que este instituto político ha venido a menos de manera “ruin e injustificada”.
Desafortunadamente, nuestra participación política en la ciudad ha ido disminuyendo y nuestra presencia ha ido decreciendo de manera ruin e injustificada, porque tenemos todos los elementos para ser el mejor partido de esta ciudad sin duda”, sostiene.
Lerdo de Tejada admite que ahora los “priistas de experiencia” tienen la necesidad de acudir a la sociedad civil, a las candidaturas ciudadanas y a los ciudadanos que, decepcionados de las opciones de los partidos, buscan en los ciudadanos nuevas posibilidades de participación política.
Expectativa
Algunas voces de los liderazgos priístas, que no quisieron ser identificadas, coinciden en criticar que a un mes de ocupar funciones de presidente del PRI, el ex gobernador de Hidalgo, Francisco Olvera, desconoce la operatividad política y la capital mexicana.
Hay quienes aseguran que Olvera no ha acudido a ningún evento del precandidato, que no se ha reunido con las diferentes expresiones, que la precampaña la opera el presidente del CEN, Enrique Ochoa Reza, que, incluso, fue él quien acordó en esta primera etapa con Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre un apoyo en 16 eventos delegacionales que se vean multitudinarios, pero que no saben si se lograrán.
El pasado sábado 20 de enero, Olvera Ruiz acudió a Milpa Alta a marcar presencia junto a Mikel Arriola y una de las aspirantes a esa alcaldía, Mariana Moguel Robles.
Él mismo admite que desconoce la operación política. Pero para ello, ha mantenido de manera permanente reuniones con los líderes de las diferentes corrientes para actualizarse.
No obstante, hasta el momento, Gutiérrez de la Torre no se encuentra contemplado en la estructura del equipo de campaña, pero ha comenzado a negociar candidaturas con Ochoa Reza.
Sobre el peso político que representa Gutiérrez de la Torre en el Revolucionario Institucional capitalino, Mikel Arriola lo reconoció, aunque no precisa si estará contemplado en la estructura de la campaña.
Lo subrayo, yo vengo a sumar, a reconocer esfuerzos y esos esfuerzos encaminarlos a una meta central que es la elección de julio, ése es nuestro primer objetivo, –asegura Arriola–. Creo que todos estamos muy unidos, en el consejo consultivo quedó de manifiesto que todos los grupos y expresiones están con el precandidato”.
Al respecto, Olvera Ruiz tampoco habla directamente de Gutiérrez de la Torre, pero asegura que “nadie sobra”, sino que todos los liderazgos del PRI son importantes y necesarios, sin señalar a algún grupo en particular.
EFECTO PEÑA NIETO
Las diferentes corrientes al interior del PRI capitalino temen que no se puedan llegar en esta elección el millón 200 mil votos alcanzados en el 2012, mucho menos superarla.
La elección pasada el efecto Peña Nieto favoreció al PRI en la capitalina, donde no teníamos recursos, ni estructura para tener presencia en los más de cinco mil distritos electorales y con una candidata como Beatriz Paredes. No tenemos manera de cuidar el voto el día de la elección, mientras que Morena y el PRD van a ir con todo, dinero, estructura y personal”, dijo un representante de una asociación política nacional adherente al tricolor.
En la elección de 2012, el PRI en la Ciudad de México recabó un millón 236 mil votos, para 2018 se estima que podrían llegar a un millón 250 mil, los optimistas aseguran que será un millón y medio.