Persisten irregularidades en detenciones de infractores

  • Resultados de la ENPOL dejaron ver que el 21.5 por ciento de las personas privadas de su libertad fue sustraída de un lugar privado, sin una orden de detención

Persisten las irregularidades en la detención de las personas que van desde corrupción y violencia, las cuales llegan hasta el proceso de sentencia y durante la estancia en las diferentes cárceles, así lo reveló la Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad (ENPOL), realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Los resultados de la ENPOL dejaron ver que el 21.5 por ciento de las personas privadas de su libertad fue sustraída de un lugar privado, sin una orden de detención. Mientras que el 75.6 por ciento de la población privada de la libertad sufrió algún tipo de violencia psicológica al momento de su arresto; 58.3 por ciento fue incomunicada o aislada al momento de su arresto y 52.5 por ciento fue amenazada con levantarle cargos falsos por parte de la autoridad que realizó el arresto.

Asimismo, el 63.8 por ciento de la población privada de la libertad en 2016 sufrió algún tipo de agresión física al momento de su arresto. De ella, 59 por ciento recibió patadas o puñetazos por parte de la autoridad que la arrestó y 39 por ciento recibió golpes con algún objeto.

A nivel nacional, la ENPOL permite estimar que 49.6 por ciento de la población que se encontró privada de la libertad durante 2016 fue presentada ante el Ministerio Público en un lapso de 4 horas o menos; mientras que 11.8 por ciento fue presentada después de haber transcurrido más de 48 horas.

A partir de la ENPOL se estima que, a nivel nacional, 67.6 por ciento de la población que se encontró privada de la libertad durante 2016 fue informada sobre el motivo por el cual la acusaban al ser presentada ante el Ministerio Público, mientras que 56.2 por ciento fue evaluada por un médico. Por otro lado, sólo 19.8 por ciento pudo contactarse con un abogado en esta etapa del proceso.

Entre los resultados de la encuesta destaca que el 73.2 por ciento de la población privada de la libertad durante 2016 fue interrogada durante su estancia en la Agencia del Ministerio Público. De ella, 70.8 por ciento identificó al Agente del Ministerio Público como la persona que llevó a cabo el interrogatorio.

A nivel nacional, 62.6 por ciento de la población que se encontró privada de la libertad durante 2016 rindió su declaración durante su estancia en el Ministerio Público, de estos, 46.6 por ciento sufrió presiones por parte de policías o autoridades para dar otra versión de los hechos. Por otra parte, en 42.1 por ciento de los casos la autoridad apuntó exactamente lo que se dijo en la declaración.

En el país, 47.5 por ciento de la población que se encontró privada de la libertad durante 2016 y rindió su declaración ante el Ministerio Público se declaró culpable. De ella, 45.7 por ciento lo hizo, en primera instancia, porque reconoció los hechos.

La ENPOL permite estimar que 43.4 por ciento de la población privada de la libertad en 2016 que se encuentra en proceso de ser sentenciada, ha permanecido recluida en al menos un Centro Penitenciario durante más de dos años. Por otra parte, 10.8 por ciento de dicha población lleva 6 meses o menos en espera de obtener su sentencia.

La población privada de la libertad es víctima de actos de corrupción durante todas las etapas relacionadas con el arresto, proceso penal y reclusión en el Centro Penitenciario, por entidad federativa, puesto que el 39.3 por ciento de la población privada de la libertad confirmó que fue víctima de actos de corrupción en al menos una de las etapas relacionadas con su reclusión.

La ENPOL permite estimar a nivel nacional 108 víctimas de corrupción por cada mil personas privadas de la libertad al interior del Centro Penitenciario en 2016. En Centros Penitenciarios Federales, esta tasa fue de 17 víctimas de corrupción por cada mil personas privadas de la libertad; mientras que en Centros Penitenciarios Estatales y Municipales, fue de 119.

Además, el 66.4 por ciento de la población privada de la libertad pagó por exentar el pase de lista como una forma de corrupción al interior del Centro Penitenciario.

Para la ENPOL se visitaron 338 Centros Penitenciarios de los ámbitos federal, estatal y municipal en las 32 entidades federativas, con lo que se cubrió la totalidad de los centros habitados en el país. El marco muestral fue de 211 mil personas, de estas, 5 por ciento fueron mujeres. La Encuesta consideró una muestra total de 64 mil 150 personas privadas de la libertad en el año 2016.