Al ser patrimonio cultural de la Humanidad, Xochimilco buscará recursos internacionales de la Unesco, entre otras organizaciones, tras el sismo de 7.1 de magnitud que en esa zona rural de la Ciudad de México partió la tierra y provocó hundimientos.
La zona chinampera del pueblo de San Gregorio Atlapulco, donde se cultiva lechuga, brócoli, verdolaga y berros, registra grietas de entre tres y cinco metros de largo, mientras que el nivel del agua en los canales bajó en promedio 15 centímetros.
En un recorrido se pudo constatar las fisuras en los humedales de San Gregorio y San Luis, que suman 300 metros lineales, por lo que los productores de hortalizas se dicen sorprendidos, pero a la vez están preocupados por el impacto en los procesos de producción.
Se preparan para la cosecha de la flor de cempasúchil, puesto que se acerca noviembre; sin embargo, lamentan que ninguna autoridad se haya acercado con ellos para revisar los daños y descartar algún riesgo para los campesinos.
El delegado en Xochimilco, Avelino Méndez Rangel precisó que en la zona lacustre se rompieron bordos, se afectaron diques y se derrumbaron riberas, por lo que el movimiento telúrico impactó de manera considerable al medio ambiente.
Dijo que las estimaciones se harán cuando acaben los censos, pero la delegación, afirmó, está buscando fondos internacionales porque al ser patrimonio cultural de la humanidad tiene la necesidad de recursos de instancias como la Unesco.