Boricuas esperan que visita de Trump multiplique ayuda

Ante la devastación de las infraestructuras tras el paso del huracán “María”, el Gobierno puertorriqueño espera que la visita de este martes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sirva para multiplicar la ayuda a la isla.

El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, aprovechó su conferencia de prensa diaria para subrayar que la visita del republicano es importante, tanto para los miles de miembros de agencias federales que trabajan sobre el terreno en labores de ayuda como para los puertorriqueños, por el apoyo moral que supone.

Los boricuas son ciudadanos orgullosos de la ciudadanía estadunidense», señaló Rosselló, quien empleó la situación para señalar, a su juicio, la desventaja que sufren los residentes en la isla por vivir en un Estado Libre Asociado a Estados Unidos, estatus que no dudó de catalogar de colonial.

¿Cómo podemos tener un territorio colonial con 3.5 millones de estadunidenses que no tiene acceso a los mismos derechos que si vivieran en Estados Unidos?», se preguntó Rosselló.

Es un problema viejo y necesitamos una solución ahora», subrayó el gobernador, para quien es importante que Puerto Rico se convierta en un nuevo estado para alcanzar igualdad y mejorar las condiciones de vida de la población, un tema que, en principio, no está en la agenda de la visita del mandatario.

A su vez, ahondó en el hecho de que los habitantes de la isla solo tienen una cuarta parte de los derechos que los estadunidenses, teniendo todos los mismos pasaportes.

Estamos (EU) listos para ir a Cuba y Afganistán, como podemos pedirles democracia si no la tenemos en nuestra propia casa (Puerto Rico)», reflexionó Rosselló.

Rosselló también detalló que entre los problemas actuales de la isla se encuentran su dependencia de una Junta Fiscal de Supervisión impuesta EU, los problemas fiscales y económicos que sufre desde añosy, que se haya visto afectada por dos huracanes, “Irma” y “María”, en el espacio de dos semanas.

A menos que se resuelva la falta de igualdad, seguirán viendo a los puertorriqueños en desventaja», sentenció Rosselló.

A poco de cumplirse dos semanas desde que el huracán “María” devastara a la “Isla del Encanto” en diagonal entrando por la costa sur, el panorama que se encontrará Trump es el de un territorio que, muy poco a poco, trata de reponerse de unos daños a infraestructuras incalculables y que dejaron una cifra de 16 muertos, que podría revisarse en el futuro.

Las infraestructuras fueron arrasadas por vientos sostenidos que superaron los 200 kilómetros por hora y unas lluvias que provocaron inundaciones, corrimientos de tierra y el desbordamiento de ríos.

Las pérdidas económicas son todavía una incógnita, aunque Rosselló habla de una cantidad muy superior a las del ciclón “Georges”, que dejó en 1998 daños por miles de millones de dólares.

La recuperación de los servicios básicos es muy lenta y sólo registró avances destacados en el agua, del que ya disfrutan cerca del 50 por ciento de la población, un progreso nada desdeñable si se tiene en cuenta que, por ejemplo, únicamente el 5 por ciento de la población recuperó la electricidad, el principal reto del Ejecutivo local y las agencias federales desplazadas a la isla.

Rosselló manifestó que la situación avanza, que las filas en las estaciones de gasolina son cada día menores y que en los próximos días el 75 por ciento de las gasolineras en la isla estarán operando.

Trump dijo este lunes hoy que nunca ha habido «un trozo de tierra tan devastado» como Puerto Rico.

Nunca ha habido un trozo de tierra que conozcamos que haya quedado tan devastado (como Puerto Rico)”, aseguró el mandatario al reunirse en el Despacho Oval con el primer ministro tailandés, Prayut Chan-ocha.

El mandatario destacó que, pese a las dificultades, se distribuyeron cantidades «tremendas» de alimentos y agua, y añadió que es increíble lo que se ha hecho en un periodo muy corto de tiempo.

El presidente generó polémica este sábado al criticar en Twitter la «pobre capacidad de liderazgo» de la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, y otras autoridades puertorriqueñas, en su gestión de la respuesta al paso del huracán.

Esa crítica llegó después de que la alcaldesa enjuiciara las palabras de la secretaria interina de Seguridad Nacional, Elaine Duke, quien destacó el jueves la buena reacción de las autoridades federales y calificó lo sucedido como «una historia de buenas noticias».