Trump elimina restricciones para la ayuda a Puerto Rico

Al cabo de varios días de presiones de legisladores, el gobierno del presidente estadounidense Donald Trump decidió levantar, de forma temporal, la Ley Jones, que hace obligatorio que sólo los barcos con bandera de Estados Unidos den servicio a Puerto Rico.

Trump, quien es criticado por demócratas ante la respuesta del gobierno federal a la crisis humanitaria en la isla, devastada por el paso del huracán «María», señaló que no eliminaba las restricciones porque existía oposición de los dueños de barcos estadunidenses.

La notificación llegó después de que el gobernador de la isla, Ricardo Roselló, hiciera el pedido a través de Twitter, el miércoles por la noche, con el objetivo de acelerar la llegada de suministros vitales.

Finalmente el Departamento de Seguridad Interna (DHS) anunció que, en principio, levantará la normativa durante un periodo de 10 días para ayudar a las tareas de transportación y distribución de combustible, alimentos, medicinas y agua a los 3.5 millones de residentes en la isla.

Esta decisión obedece a la petición del gobernador de Puerto Rico, Ricardo Roselló, y al secretario de Defensa, James Mattis, de que una exención está en el interés de la defensa nacional”, mencionó la secretaria interina de Seguridad Interna, Elaine Duke.

Bajo el nuevo arreglo, todas las embarcaciones, al margen de la bandera con la que naveguen, podrán realizar operaciones de carga a Puerto Rico con cualquier tipo de mercancía.

El magnate amplió esta semana la declaratoria de emergencia para Puerto Rico, a fin de incrementar el nivel de ayuda federal para la remoción de escombros y medidas de protección de emergencia como resultado del huracán «María».

Sin embargo, residentes de Puerto Rico, en especial en la contigua isla de Vieques, se quejaron de que la ayuda no llega a sus manos, siguen sin electricidad ni telecomunicaciones, mientras que miles están varados en los aeropuertos sin poder viajar a Estados Unidos.

¿Qué es la Ley Jones?

Es una normativa que, entre otras cosas, contiene una regulación comercial que señala que cualquier transporte de personas o mercancías entre dos puertos de Estados Unidos debe hacerse con un barco de bandera estadunidense, o de lo contrario, si lleva una bandera extranjera, será sancionado con impuestos y tarifas.

Dicha ley fue rápidamente suspendida en los estados de Florida y Texas tras el paso de los huracanes “Harvey” e “Irma”.