Turistas visitan el Muro de las Lamentaciones en Jerusalén

El Muro de las Lamentaciones en Jerusalén, Israel, es el sitio más sagrado para los judíos, porque es el único trozo que queda de la muralla de contención del Templo de Jerusalén, que fue el primer templo de esta religión.

Este lugar también es llamado como la Muralla Occidental o el Muro de los Lamentos, porque durante siglos los judíos han llegado allí a lamentar la pérdida de este templo.

Las rocas más bajas de esta muralla, que también son conocidas como ashlars, son de los tiempos del Segundo Templo construido por Herodes, y tienen sus lados tan perfectamente tallados que se pusieron unas sobre las otras sin nada para pegarlas.

En la parte de las plegarias se pueden ver trozos de papel con oraciones entre cada una de las rocas, así como judíos ortodoxos y algunos otros judíos que llegan allí para recitar todo el libro de los Salmos.

Al Muro de las Lamentaciones pueden ir visitantes de todas las religiones y creencias, y de hecho es uno de los sitios turísticos más importantes de toda esta ciudad. Los hombres tienen que llevar un sombrero o gorro, o tomar uno de los cobertores de cabeza que están ubicados a la entrada de la zona de las oraciones, y las mujeres también pueden tomar los chales y cobertores para las piernas.

Esta sección está dividida para hombres y mujeres, manteniendo así las tradiciones judías ortodoxas.

Junto a la zona de oración para las mujeres se puede ver una parte del Muro que está hecho por rocas más pequeñas, que en realidad pertenecían a la puerta que llevaba hacia el Monte del Templo, y hacia el sur se pueden ver trozos de roca saliendo de la muralla, que es parte de lo que era una escalera con arcos que iba sobre la calle del mercado.

La plazoleta que está en frente de este muro, funciona como una gran sinagoga al aire libre y allí se reúnen diariamente miles de devotos y se hacen algunas veces servicios especiales.