Dez Bryant jugará esta noche su partido 100 de temporada regular y por tercera ocasión consecutiva su misión será complicada; otra vez contra un esquinero élite de la NFL, cuando los Dallas Cowboys visiten a los Arizona Cardinals en el University of Phoenix Stadium.
«Mi confianza está tan alta como el cielo», dijo Bryant esta semana. «Siempre va a ser de esa manera. El lunes por la noche tengo otra oportunidad. No puedo esperar».La vida de Bryant esta temporada no comenzó nada fácil para el estelar receptor de los Cowboys, a pesar de que aseguró que venía en su mejor forma física y mental desde que en el 2010 llegó a la organización.
«No siento presión en absoluto», afirmó Bryant. «Es un proceso. Vamos a seguir en lo mismo. Trabajando fuerte, porque sé qué tengo y confío en lo que puedo hacer».
La primera semana de la campaña, Bryant tuvo que enfrentarse casi de manera personal contra el mejor esquinero de los Giants, Janoris Jenkins, y la siguiente al pro bowler de los Broncos, Aqib Talib. Sus días fueron complicados contra ambos.
Este lunes, es grande la posibilidad de que los Cardinals pongan cobertura también casi personal a otro pro bowler, Patrick Peterson.
En los primeros dos partidos, Bryant acumula nueve recepciones para 102 yardas combinadas en la victoria sobre los New York Giants y la derrota contra los Denver Broncos; estadísticas que él mismo considera debajo de los estándares para el receptor principal de una de las ofensivas que se supone debe estar entre las más explosivas de la liga.