19S: el día que los millenials se unieron y levantaron a México

«¡Se necesitan picos, palas, cascos, ayuden con esa herramienta para sacar a la gente de los escombros!», gritaba una joven de no más de 25 años cuando daba mi recorrido por la zona de la colonia Roma apenas un par de horas después del sismo del 19 de septiembre. Cuando iba a bordo del autobús que me llevaba rumbo a la avenida Insurgentes, vi muchos jóvenes corriendo, muchos de ellos ya con cascos y chalecos de rescatistas colocados para comenzar a ayudar en donde se les requiriera.

Flojos, activistas de monitor, egocéntricos, comodinos, malcriados, individualistas y consumistas. Todas esas características con las que se describe a la generación Millenial, quedaron sepultadas bajo los escombros cuando se convirtieron en un ejército mexicano para ayudar a quienes más los necesitaran. Vi cómo se organizaban para agilizar el tránsito, como por sus manos pasaban piedras y piedras para una a una rescatar lo más pronto posible a las víctimas de los edificios colapsados.

«¡Cadena humana!» gritaba Aldo Merlos Almaraz, un joven al que no le gusta la etiqueta millenial, uno que no vivió el terremoto de 1985, pero que a partir de hoy, junto a cientos, miles de jóvenes más, serán considerada la generación millenial que sacó a México de entre sus escombros, para levantarlo y darle fuerza una vez más.

«Nunca me ha gustado el término “millenial” porque sé que pertenezco a esa generación y nos tienen en un concepto de “ninis”, que no queremos hijos, que no nos queremos casar», dice Aldo a Cultura Colectiva Noticias. «Pero creo que a partir del 19 de septiembre va a cambiar su forma de vernos», agregó.

Las imágenes no dejan mentir. Apoyados sí por las redes sociales, pero usándolas de la mejor manera posible, los jóvenes que integran la generación millenial se organizaron sin conocerse el uno al otro y junto con aquellos que vivieron también el terremoto de 1985, formaron un ejército para dirigir el tránsito, para recaudar víveres, para separarlos, para trasladarlos incluso a las regiones que no tuvieron el foco de los medios de comunicación.

Merlos Almaraz destacó la labor de los jóvenes que lo acompañaron a la comunidad de Contla, en Morelos, un pueblo que quedó devastado tras el sismo. «En uno de los lugares a los que fui me dijeron “gracias a los jóvenes que nos traen ayuda, no se olviden tan pronto de nosotros”, eso me partió el alma».

Otra de las jóvenes que integran la generación millenial es Adriana Pérez, quien a través de verificación de información en redes sociales, colaboró para que la población estuviera comunicada respecto a fuentes verídicas en redes sociales. «Creo que la apatía será menos», responde a pregunta expresa de cómo cambiarán los millenials después del 19 de septiembre. «Las causas sociales van a empoderar a los jóvenes y ya no van a dejar que la vida pase sin un cambio que provenga de ellos».

Los millenials, tras el 19 de septiembre de 2017, se convirtieron en lo que fueron sus padres en 1985: barrenderos, agentes de tránsito, chóferes, vigilantes, rescatistas, voluntarios, soldados, meseros. La generación millenial no olvidará este 19 de septiembre de 2017 y el resto deberá replantear su definición, una muy alejada de la concebida antes del sismo.