El huracán “María” dejó a su paso por Puerto Rico devastación y extensas áreas inundadas, además de la caída total de la energía eléctrica y la muerte de al menos una persona, con lo que sube a 10 el número de fallecidos en su paso por las Islas Vírgenes y las Antillas.
Una vez pasado el huracán, las agencias de gestión de emergencias comenzaban a evaluar los daños.
“Todavía no tenemos mucha información. Estamos totalmente desconectados en términos de telecomunicaciones con el Sureste de la isla”, dijo el gobernador, Ricardo Rosselló, aunque advirtió que se preveía un “daño extenso” en diversos inmuebles.
La alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, dijo que en la ciudad la devastación fue “prácticamente absoluta” y reconoció que luego del paso del huracán, “nuestra vida como la conocíamos cambió”.
El gobernador decretó un toque de queda para garantizar la seguridad en la isla: “Mantener el orden resulta fundamental para que las autoridades puedan ejecutar apropiadamente”, dijo vía Twitter.
“María” perdió fuerza después de azotar Puerto Rico y es actualmente un huracán de categoría 2, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, aunque los meteorólogos prevén que hoy recupere fuerza a su llegada a República Dominicana.