Joachim Löw, seleccio nador alemán, calificó como una verdadera “vergüenza para Alemania” los cartelones y cánticos con propaganda nazi proferidos por un grupo de ultras alemanes el pasado viernes durante el partido clasificatorio para el Mundial ante la República Checa en la ciudad de Praga.
“Me perdonarán, pero no puedo pasar directamente a las cuestiones deportivas sincomentar lo que ocurrió en Praga”, comentó Löw en tono muy serio, en la conferencia de prensa previa al partido ante Noruega.
“Estoy lleno de enojo, de rabia, y muy, muy afectado al ver que algunos que se autodenominan aficionados utilizan un bello deporte como el futbol y un partido internacional para sus desafortunadas demostraciones… Esto sólo llena de vergüenza nuestro país”, insistió.Al mismo tiempo, Löw se congratuló por la decisión de sus jugadores de no acudir altérmino del partido a saludar a la parte de la tribuna donde estaban esos aficionados, aldirigirse directamente a los vestuarios.
El seleccionador mostró todo su desprecio: “No los queremos, no somos su selección y ellos no son nuestros aficionados”. “A pesar de nuestra historia, es muy importante que representemos dignamente a nuestra patria, a nuestro país, con sus valores de tolerancia, respeto y apertura al mundo”,prosiguió.
Un grupo de hinchas alemanes molestaron durante toda la ceremonia de los himnosnacionales antes del partido y luego durante un minuto de silencio, que tenía lugar enmemoria de dirigentes del futbol checo, y profirieron proclamas nazis.
Durante el encuentro insultaron persistente y especialmente al joven Timo Werner, de 21 años, quien ya es objeto habitualmente de cánticos similares por ultras hostiles al RB.Leipzig, club que es propiedad de la empresa Red Bull, y que la temporada pasada simuló un penalti.
Joachim Löw concluyó su reflexión con el siguiente comentario: “Ese comportamiento de algunos ‘aficionados’ es indigno. Timo cometió un error y lo reconoció, ahora apelo a queel público lo trate por completo como un jugador de la selección de Alemania“.