Mia Khalifa, la actriz porno libanesa que ISIS tiene amenazada

La pornstar libanesa de 24 años, Mia Khalifa, teme que adeptos del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) vayan por ella y le corten la cabeza. A través de redes sociales ha recibido decenas de amenazas del grupo terrorista, desencadenadas por hacer una escena pornográfica con un hijab, velo musulmán que cubre la cabeza y el cuello, dejando al descubierto el rostro de la mujer.

Durante el fin de semana, en el programa radiofónico The Sport Junkies, la actriz contó que los terroristas le enviaron una de sus fotografías editadas, para que pareciera que había sido decapitada y advirtieron «eso es lo que te va a pasar».

Mia empezó a recibir amenazas poco tiempo después de incursionar en el cine triple X, a través de redes sociales. Sin embargo, ella no ha flaqueado ante las sentencias. Claro que le preocupan, pero trata de no demostrarlo, pues «no puedes mostrar debilidad, ya que eso es precisamente lo que buscan (los terroristas)». Mia ha hecho todo lo posible por llevar una vida normal, haciendo como si no le importara, aunque al final siempre «acaba afectando tu vida».

Hace dos años, en una entrevista para The Washington Post, la estrella del cine para adultos con residencia en Estados Unidos confesó que su cuenta de Instagram fue hackeada, contó por primera vez que había sido amenazada de muerte y que había recibido decenas de mensajes que despreciaban su carrera como actriz porno, tanto de la organización terrorista como de los musulmanes alrededor del mundo.

Aunque actualmente Mia suspendió su carrera pornográfica, su trabajo desató una oleada de críticas en el Medio Oriente, donde la consideraron una «desgracia» para la religión islámica y es que en las naciones musulmanas la venta de material «erótico» está prohibido, excepto en Líbano y Turquía.

Muchos musulmanes se vieron ofendidos específicamente por un video que la exhibe teniendo relaciones sexuales mientras porta una prenda tradicional, lo que describieron como algo «repulsivo».

En su defensa, Mia aseguró que la escena estaba destinada a ser satírica, además de que hay muchos otros filmes de Hollywood que atacan a los musulmanes de «peores maneras» que cualquier escena que jamás haya hecho ‘Bang Bros’, la compañía que producía sus videos.

La actriz también ha sido criticada por los tatuajes que tiene y que hacen referencia a Líbano: uno es la primera línea del himno nacional y otro de las Fuerzas Armadas. En realidad, le duele que en su país de origen la odien por la profesión que eligió, según dijo para Washington Post.