La instalación de la empresa BMW en la Área Metropolitana de San Luis Potosí, constituye sin lugar a dudas una oportunidad para el crecimiento económico y la mejora en la calidad de vida, sin embargo las autoridades y la misma sociedad debe estar preparada para una inversión de esta magnitud, señaló el catedrático urbanista de la Facultad del Hábitat de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, Benjamín Alva Fuentes.
Indicó que se estima que la ciudad capital junto con su zona conurbada está creciendo cerca de 7 mil habitantes por año, ritmo que se está duplicando derivado de la instalación de la empresa BMW alcanzando en términos reales un aumento de 16 mil habitantes por año.
Agregó que este crecimiento obedece principalmente a que esta nueva empresa ha llegado acompañada de sus propios gerentes, directivos y personal capacitado: “actualmente se registra un crecimiento en la instalación de empresas proveedoras que, aunque son de menor tamaño coadyuvan a los cambios”.
El repunte según el urbanista, se podrá percibir a partir de la década siguiente: “de aquí al 2020 lo primero que vamos a observar va a ser el efecto de BMW y después el efecto de los proveedores. Con esto entre el 2016 al 2025 San Luis Potosí, estará registrando un crecimiento de cerca del 20.5 por ciento de la población promedio anual”.
Finalmente, el investigador universitario reconoció que la entidad no está preparada para soportar este crecimiento: “sin embargo aseguró que aún hay tiempo para detonar proyectos, a fin de garantizar infraestructura para la movilidad urbana, complejos habitacionales, y el subministro de agua. Es decir, el crecimiento industrial debe ir a la par de la población”.