Cuando San Luis, deja de ser OPCIÓN

De Mi Puño Y Letra

En días pasados vivimos una serie de declaraciones entre la iniciativa privada y el Ayuntamiento de la Capital, encabezado por Ricardo Gallardo Juárez, en relación a la propuesta de iniciativa de decreto que busca modificar la Ley de Desarrollo Urbano del Estado de San Luis Potosí, la cual, pretende elevar el porcentaje de las áreas de donación que los fraccionamientos y subdivisiones ceden al Ayuntamiento del 15% al 20%, y en otros Estados como Guanajuato y Aguascalientes es del 12% (a donde ha emigrado la inversión de los potosinos).

Y usted estimado lector, se preguntaría:

1. ¿Cuál es el problema, si necesitamos más áreas verdes? Y la respuesta es: el área de donación, NO está únicamente destinada a áreas verdes, ya que la misma Ley contempla que se destine el 50% para equipamiento y el otro 50% para áreas verdes. Existe la problemática actual, que los constructores equipan las áreas de donación y si la idea es que existan más áreas de donación, lo mejor sería sancionar a los que equipan las áreas verdes, sin la autorización expresa del Ayuntamiento.

2. En situaciones pasadas el Ayuntamiento ha vendido áreas de donación. ¿Alguien recuerda el caso de Monterra?

3. La mayoría de los terrenos en donación están descuidados y por ser estos propiedad del Ayuntamiento, es el obligado a darle el debido mantenimiento.

4. No existe ningún plan estratégico que nos dé certeza de como es la planeación de la zona metropolitana.

5. Porque no mejor proponer la construcción de más parques en los diferentes sectores de San Luis Potosí y que de verdad se concreten.

En la actualidad algunos desarrolladores de fraccionamientos cuentan con un promedio de donación superior al 15%, porque ellos mismos invierten y equipan con áreas verdes las áreas de donación, con la finalidad de dar un «plus» para su mercado, que generen más y mejores áreas de esparcimiento para un óptimo crecimiento familiar y brindar mejores condiciones de vida.

Así que solo nos queda un grupo segregado; el trabajador que tiene un salario menor y que está buscando un hogar de precio accesible para aprovechar los subsidios federales para la adquisición de un patrimonio, pero desgraciadamente estos fraccionamientos de interés social, no cuentan con el plus de grandes áreas verdes o de mayor equipamiento porque sobrepasa los costos de tope para ser accesibles al trabajador. Lo que es una realidad es que en San Luis Potosí no hay ni en proceso, ni en obra o en terminación, ningún fraccionamiento de este tipo. Hay más de 30 mil trabajadores esperando su crédito para una vivienda en áreas conurbadas a la capital.

Entonces, ¿en donde se encuentra el beneficio de subir el porcentaje? ¿Realmente es para contar con más áreas verdes o el fin es otro?

Hacer estos cambios que afectan no solo al Municipio de San Luis Potosí, sino a 57 restantes. Vaya tema para los Diputados. Tendrán en sus manos el encarecer la vivienda de interés social que es nula, obligando a los fraccionadores y a los ciudadanos que subdividan un bien inmueble, a donar un mayor porcentaje. ¡Pffff!

Debemos entender que uno de los motivos por los que la inversión en San Luis Potosí no se ve reflejada, es porque impera la corrupción a gran escala y si los maestros de la corrupción NO dejan facturas o notas, son demasiado listos para hacer eso, como dirían por ahí: «son muy vivillos».

Hacer caso omiso de lo que la ciudadanía exclama a gritos, solo habla de la falta de sensibilidad y cercanía a todos los gobernados, estamos inmersos en una fuerte crisis de valores políticos, política como el arte de hacer las cosas y como el poder transformar y tomar decisiones basadas en un bien común, sin el ánimo de perjudicar al ciudadano.

IMPORTANTE ver todas las aristas de los problemas o de lo que se pudiera causar. La sillas pueden quedar muy grandes, más si no sabes cuál era la tuya, la de allá o la de aquí.