Diego El Cigala pinta sus lágrimas de colores

La última vez que Diego El Cigala estuvo en el Teatro Diana, las lágrimas negras que tanto le rodaron por los escenarios tenían un significado especial: el reciente fallecimiento de su esposa Amparo Fernández; cada canción interpretada venía con una carga emocional que hizo vibrar el recinto tapatío, porque la nostalgia simplemente era imposible de evitar.

A más de un año de ese momento, El Cigala regresa a Guadalajara el 28 de octubre, ciudad que lo arropa y él lo agradece incluso abriendo fechas como la del año pasado cuando sorprendió casi de último minuto para un dar recital en el Teatro Degollado. Sin embargo, aunque las “Lágrimas Negras” —canción que lo identifica al lado de otro entrañable como Bebo Valdés— lo siguen acompañando, ahora viene más sonriente, vivo y hasta feliz, pues el son cubano de Omara Portuondo lo ha dotado de ritmos que los tapatíos no se deben perder.

En entrevista con este medio, Diego El Cigala comparte cómo ha sido la magia que lo une con Portuondo y lo que viene para él profesionalmente.

—Yo tenía muchas ganas de cantar con ella a raíz de Buena Vista Social Club y lo que sucedió con “Lágrimas Negras”. Fui a cantar a La Habana y se presentó Omara. Estábamos en el estudio y todo fue de lo más real y lo más natural, me dijo Omara: “Yo no quisiera irme para la otra vida sin cantar juntos”. Eso me llenó de emoción y nos pusimos a hablar los managers, los promotores, y le dije: —Omara, ¿hacemos una gira? —“Claro”, me respondió. Y ha sido una de las experiencias más bonitas que he tenido en la música. Ella es una escuela de mucho poderío, de mucha enjundia. En el escenario la voz de Omara te invita a cantar y el resultado es que nunca se había visto una voz flamenca con una voz cubana, y la conexión ha sido inmediata. Espero que la gente lo goce, solamente por tener este testimonio de la verdad, con ese tempreramento que la caracteriza a ella.

—¿Qué contiene este show que viaja a través del son cubano y el flamenco?

—Hacemos temas del repertorio de ella, hacemos temas de “Lágrimas”, después ella canta sola en su espacio, lo mismo hago yo, y luego nos unimos con el tema de “Silencio”, “Corazón loco”, “La bien pagá” que disfruto mucho con Omara, porque haciendo una copla andaluza el empaque que le da Omara, lo canta bien, es como “la doña” que nos queda. El concepto es variado, lo bonito de este espectáculo es la versatilidad también con los músicos, vamos con un cuarteto maravilloso de percusión latina, bajo, piano y una batería.

—La última vez que estuviste en Guadalajara fue con aires de nostalgia, hoy se te ve más iluminado, lleno de color por esos ritmos cubanos. ¿Cómo mantienes esa sonrisa a pesar de las tristezas que te rondan?

—Dicen que después de la tormenta viene la calma. Después de tanto dolor y pesares. Como saben perdí a mi esposa, perdí a mi madre, ha sido muy duro de llevar. Pero vivo gracias al mundo de la música y al público que me sigue, me quiere y me respeta. Le doy gracias a Dios y siempre miro la vida con una sonrisa, que siempre lo he hecho, pero ahora más porque como dice el refrán: “Cuando uno se muere, pierde al mejor amigo que tuvo, que es uno mismo”. Esto me lo decía mi entrañable amigo Gabriel García Márquez. Lo echo de menos, tanto a él como a Bebo Valdés, a Chavela Vargas, a Mercedes Sosa, imagínense a esos cuatro…

—¿Qué le falta por dar a El Cigala?

—Tengo un proyecto que se llama “El Cigala canta a México”, con temas de Javier Solís, José Alfredo, Vicente Fernández, estoy en la búsqueda. Es un proyecto que lo llevo desde hace años en la mente, incluso antes de “Cigala & Tango” yo ya quería cantar a México, tengo en la mira los boleros rancheros, porque pienso que son nostálgicos y sentidos como el flamenco, que somos románticos y el público así es de romántico. Creo que un buen bolero es como cantar una buena bulería.

—¿De qué está enamorado hoy El Cigala?

—Estoy enamorado de la vida, de mis hijos; no hay amor más grande, por encima de todo están mis hijos siempre. Gracias a Dios, sin él no vamos a ningún lado.

Prefiere lo tradicional, y quiere dueto con Luis Miguel

A Diego El Cigala no le llama la atención que las cifras crudas de plataformas como Spotify le muestren que tiene casi 400 mil oyentes mensuales o casi cinco millones de reproducciones de su canción “Historia de un Amor”. Para él, esta forma de “leer” la música le es un tanto ajena. “Soy más de los grandes de atrás, yo respeto toda la música del día de hoy pero veo que no va conmigo. No me siento en ese campo, no es mi área, no haría nada que pudiera perjudicar a la música, y yo que vengo del mundo del flamenco a mi me gusta la música clásica. Soy de esa escuela”.

Sobre su conexión musical con México, se confiesa admirador de Luis Miguel. “Me gusta mucho lo que hace Luis Miguel. Me encanta como canta. Es una genialidad, me encantaría algún día cantar con él. Espero todo lo suyo se arregle porque los genios nunca mueren, él es un genio. El verme con él en un estudio, yo creo que mi recompensa en esta vida estaría más que pagada”.

TOMA NOTA
¡Asiste!

Omara Portuondo & Diego El Cigala. Sones, boleros y éxitos
Teatro Diana
Sábado 28 de octubre, 20:30 horas.
Boletos en el sistema Ticketmaster desde $300 a $2,100 pesos.