La vivienda de un pequeño propietario de la comunidad Catedral, en Santa María del Río, fue saqueada por un grupo de personas, de quienes se dijo eran comuneros, supuestamente porque ellos, los comuneros, son los legítimos propietarios del predio donde se encuentra la finca, cuyo propietario no se encontraba por estar enfermo.
Se dio a conocer, a través de un video, la acción de un grupo de personas, hombres y mujeres, quienes llegaron a la vivienda del señor Pedro Bárcenas, una persona adulta mayor, quien se encuentra en la ciudad de México, donde le atienden de una enfermedad.
Nadie se encontraba en la vivienda cuando llegaron los supuestos comuneros y procedieron a sacar parte de las pertenencias de don Pedro, ollas, sartenes, bolsas y todo cuanto encontraron a su paso, o lo más práctico, para poder llevárselo.
Mientras, al saberse la noticia que un grupo de hombres habían llegado a la casa de don Pedro y sacaban lo que encontraban, varios vecinos se acercaron y corroboraron la acción de quienes saqueaban la vivienda.
Una familia de don Pedro, también llegó al lugar y procedió a tomar video de la acción de quienes se dice son ejidatarios, quienes no se intimidaron y continuaron con la acción de sacar el menaje de casa.
El problema, según indican, es que, los comuneros estaban en posesión de los terrenos ahora en disputa, y fueron desalojados por un grupo de supuestos pequeños propietarios, de ahí se ha originado el conflicto entre comuneros y pequeños propietarios.
Los comuneros exigen la devolución de sus terrenos, algunas personas aseguran que si llevaban la orden de desalojo, sin embargo no fue desalojo lo que hicieron, eso es tipificado en el código penal vigente como robo. Además para un desalojo debe estar presente un actuario y la fuerza pública; ninguno de los dos estuvo.