La renuncia de José de Jesús Martínez Loredo a la ASE y la del diputado Enrique Flores al PAN, tras el escándalo de corrupción por “lavado” de cuentas públicas que destapó un video grabado por el alcalde de Ébano Crispín Ordaz, también del PAN, es sólo la punta del iceberg.
La verdad es que la ciudadanía no se traga el cuento de que con correr al Auditor y su camarilla, renovar la Comisión de vigilancia y quitar a Flores de la Jucopo se resuelven los problemas, porque para el vulgo es la misma gata, solo que revolcada. Y menos cuando como último acto, en 32 minutos los anteriores Comisionados de Vigilancia aprobaron los dictámenes de la ASE de todos los ayuntamientos.
Aun cuando la nueva presidenta, Graciela Gaytán, diga que la aprobación final estará en manos del pleno, la suspicacia popular lleva a concluir que “cambiaron la facha, pero lo de adentro sigue igual de podrido”.
Sobre todo porque nadie se explica cómo pasaron sin extrañamiento alguno irregularidades que se han denunciado, como la compra de medicamentos donde figuró el nombre de Sandra Sánchez Ruíz, de quien hasta el día de hoy no se conoce su verdadera identidad, aprobaciones de fraccionamientos y cambios de uso de suelo que jamás fueron votados por el cabildo y la falta de datos sobre el ejercicio de las dos terceras partes del recurso que fue otorgado al ayuntamiento, pero “ya pasó”.
SIGUE OLIENDO MAL
La ASE permitió que se pasaran por alto durante el periodo de solventación, lo que permitió que ayuntamientos como el de la capital tuvieran cero observaciones, razón por la que su credibilidad disminuyó considerablemente, perdiendo el reconocimiento de los potosinos.
En conclusión: Al menos los cuatro implicados en este escándalo deben pedir licencia para separarse de la curul y que puedan defenderse jurídicamente de todas las demandas en su contra sin el cobijo del fuero que se negaron a desaparecer, lo que los diputados decentes, que los hay, y todos los demás les aplaudiríamos.
Para el caso del ahora ex titular de la ASE, José de Jesús, Pepechuy, Martínez Loredo y el ex panista Enrique Flores, la cosa En conclusión, as clara: sus carreras políticas están acabadas, a menos que haya ciudadanos potosinos indignos o tan ignorantes como para volverlos a elegir.
Y si bien entre gobierno del estado y la LXI Legislatura ya tenían cabildeada una “limpia a fondo en la ASE”, que abarcaba no sólo la salida de Martínez Loredo sino también de todo su equipo Fernando Barrera, Abraham Payán y Humberto Pérez, además del nefasto Manuel Abraham Reinhardt Guerrero, que hizo punta desde el miércoles, nadie aclara que esa limpia debe quedar al margen de los diputados, que ahí tenían a sus amigos, parientes y demás.
BONDADES DEL NSJP
En lugar de Martínez Loredo entró, con base en el Artículo 72 de la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas del Estado de San Luis Potosí, la Auditor Especial de Fiscalización Gubernamental, de Organismos Autónomos y Descentralizados, la CP Rocío Elizabeth Cervantes Salgado, en calidad de “encargada de despacho”.
La verdad es que Pepechuy tenía mil y un motivos para irse. Está enfermo, ya rebasó la edad para el cargo y ya blanqueó lo más que pudo las cuentas de Fernando Toranzo Fernásndez, su “padrino” en la ASE.
Por esa razón Enrique Flores le enfilo 3 denuncias penales e igual número de solicitudes de juicio político, que no llegaron a más pues, de acuerdo al Nuevo Sistema de Justicia Penal “las partes llegaron a un acuerdo” y el demandante se desistió. Igual hizo el diputado Manuel Barrera Guillén, y hoy sabemos que fue lo que acordaron. Para eso también sirve el NSJP.
Por lo pronto, Cervantes Salgado estará al frente de la ASE provisionalmente el tiempo que se requiera para que el Congreso emita una convocatoria y realice un proceso formal para seleccionar al nuevo titular, lo que levará meses.
XITLÁLIC, POR RESTA
En este marco Enrique Flores anunció su renuncia al PAN,en una carta donde dice al líder nacional Ricardo Anaya “quse va del partido donde militó 20 años porque el PAN está enfrascado en luchas de intereses, de proyectos personales y sin ánimo de buscar el bien común” ¿Qué tal? Así debió ser digno para lo de los moches, ¿No cree=
Lo cierto es que su renuncia reduce a 6 la bancada albiazul, donde también el diputado Mariano Niño, el que sacó la mayor votación de la camada, tiene encima un proceso de expulsión.
De no disciplinarse y sumarse al rebaño de los azuaristas podría dejar la bancada y cumplir el sueño de Xitlálic Sánchez de asumir el liderazgo camaral y la Jucopo, cuyo nuevo titular, Jorge Luis Díaz Salinas, solo tiene el “mérito” de haberse ido a Alaska financiado por Panavi, sin olvidar que la limpia en la Comisión de Vigilancia fue muy ligth.
La decencia obligaba a mostrar interés por resarcir los daños al Congreso del Estado en cuanto a respeto y credibilidad. Al menos para lograr un margen de duda hacia sus clamores de “inocencia” o chistes como el de “soy el diputado más pobre”, que más que apaciguar eleva el malestar social.
DAÑO HISTORICO
¡Basta de ratones azules, tricolores, amarillos y de la fauna que sea! Esto no puede irse al simple anecdotario de una legislatura que, lamentablemente ya tomó su lugar en la historia como la más cínica, corrupta e incapaz de SLP.
Y esto no es hacer leña del árbol caído porque lo que se exige es el simple cumplimiento de la Ley. ¿No juraron que cumplirían y harían cumplir la Ley? ¡Qué cumplan¡ Para eso es que se requiere la revocación de mandato y, obvio, tampoco lo aprobaron. ¡Feliz Día del Padre!.