México desencadenó una corriente de muerte y terror que no logra detener, afirmó este sábado el cardenal Norberto Rivera Carrera, al celebrar una misa con motivo del centenario de las apariciones de la virgen de Fátima.
La sangre de tu hermano me está gritando desde la tierra. Nuestro México ha sido capaz de desencadenar una corriente de muerte y de terror que no logra interrumpirla», afirmó el arzobispo primado, durante su homilía.
La misa por el primer centenario de las apariciones en Fátima, Portugal, se celebró a las 18:00 horas en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México.
La ceremonia fue acompañada por diversas piezas musicales, entonadas por la Orquesta Clásica de la Ciudad de México, bajo la dirección de Carlos Esteva Loyola.
En la sagrada escritura se muestra a menudo que Dios se pone a buscar a los justos, para salvar a la ciudad de los hombres.
Y lo mismo hace aquí en nuestra patria cuando nuestra señora pregunta: ‘¿quieren ofrecerse a Dios para soportar todos los sufrimientos que él quiera mandarles, como acto de reparación por los pecados por los cuáles él es ofendido?, expresó Rivera Carrera.
Tras la ceremonia litúrgica, una imagen de la virgen de Fátima fue coronada y se inició el rezo del Santo Rosario.