Dialogan senadoras con el grupo “Encuentro Mujeres y un Personaje”

Senadoras de los grupos parlamentarios recibieron a integrantes del grupo “Encuentro Mujeres y un Personaje”, que coordina la señora Perla Díaz de Ealy Ortiz, y participaron en un diálogo en el que las legisladoras narraron sus experiencias en política, ámbito en el que enfrentan condiciones de desigualdad y expusieron su compromiso a favor de la equidad de género.

La reunión fue convocada por la senadora Lilia Merodio Reza (PRI) y a ella acudieron integrantes de la mesa directiva, presidentas de comisiones legislativas, quienes en un diálogo abierto, matizado por la emoción femenina, comentaron las dificultades que enfrenta la mujer en la trayectoria política y la simultánea responsabilidad familiar de cada una de ellas. La señora Perla Díaz de Ealy Ortiz dijo que desde la sociedad civil las mujeres pueden y llevan a cabo actividades de beneficio colectivo, y agradeció el diálogo informal, franco de las senadoras, y señaló la disposición a compartir metas con las legisladoras. Concurrieron al encuentro las señoras Claudia Petelini, Andrea Vara, Gladis López Blanco, Gloria García Pantoja, Isabel Crowley, Lupita Romero de Olvera, María Teresa de Hinojosa, Sandy Rincón, Sara Cohen, Stephanie Fastlich, Teresa Fernández de Ortega, Luz Elena González. La senadora Hilda Flores Escalera, presidenta del Organismo Nacional de Mujeres Priístas (ONMPRI), comentó el escenario cerrado a las mujeres que la actual generación de legisladoras encontró y que ha empujado para abrirse el acceso a responsabilidades que los hombres están acostumbrados a apropiarse. Mariana Gómez del Campo (PAN), presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América del Norte, dijo que las senadoras, como las mujeres que ocupan otros cargos públicos, lo consiguen picando piedra, frente a los hombres que “son mañosos” a su conveniencia. Dijo que ella es presidenta de una de las comisiones más importantes del Senado, porque cuando se llevó a cabo la asignación de posiciones, la política exterior no era de interés como lo es en la actualidad, y no había disputa de varones por la responsabilidad que tiene ella. Luisa María Calderón Hinojosa (PAN) celebró la comunicación establecida en el encuentro con las señoras de la sociedad civil, y resaltó que los hombres entre ellos se arreglan, y en política legislativa, entre ellos negocian, incluso en momentos, en que las mujeres legisladoras ya se encuentran en su doble jornada familiar. “Esta batalla no hay que darla solas”, propuso. Hilda Ceballos Llerenas (PRI) comentó su motivación por la actividad política, a partir del contacto con grupos vulnerables, y el impacto que ella ha recibido al ser testigo del dolor de las personas. Aseguró que las mujeres actúan con honestidad, son comprometidas y responsables. Expresó su rechazo a la actitud de los hombres (en el Senado mismo) que acuerdan entre ellos distintas decisiones, y asumen que las mujeres “de todos modos se van a disciplinar”.

Iris Vianey Mendoza (PRD), al relatar su vida, que inició en la política a los 14 años, en Michoacán, y su primer cargo, a los 18, levantó aplausos con una actualidad: “Estoy enamorada, me voy a casar por tercera vez”, y se sumó a los testimonios de “lo difícil que te dejen pasar (en política); está cañón”. Sylvia Martínez Elizondo (PAN), de Chihuahua, dijo que en política su motivación no han sido los cargos, sino actuar en torno de las preocupaciones del país, y lo ha realizado, incluso, a costa de “descuidar a mis hijos”. Lucero Saldaña Pérez (PRI) al relatar su trayectoria remarcó que una mujer ocupada en la política, junto con su papel de ama de casa, tiene que sobresalir al sexismo, misoginia, y con un toque de coraje explicó: “Primero te ven y luego te oyen”, y cada vez escuchan a mujeres con mejor preparación. Sonia Rocha Acosta (PAN) comentó que en su afán de servir “yo pago porque me alquilen”, y es así que ha participado en las actividades públicas, desde los 22 años, como regidora, y tiene dos hijos a quienes atiende y a la vez cuida “esta enfermedad que es la política, que se controla, no se cura”. Las distintas intervenciones de las senadoras, con diversos cometarios emotivos, contagiaron su emoción, incluso con lágrimas, entre las legisladoras y las señoras del grupo “Encuentro Mujeres y un Personaje”. Rosa Adriana Díaz Lizama (PAN) contó cuando dijo a su padre que deseaba estudiar para doctora. “¿Para qué? ¿Para mantener un vago?”, fue la respuesta que recibió y ahora en la ruta por la candidatura de su partido a gobernadora, “soy la única mujer en un grupo de seis aspirantes”. Lilia Merodio Reza acompañó después a las visitantes a un recorrido por la sede del Senado, que incluyó el salón de sesiones, antes de que la sala fuera ocupada por los senadores en la asamblea de final del periodo ordinario.