En lo que va del presente año, policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina y de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) han decomisado en total 14 armas de fuego .22 milímetros y que popularmente ya se conocen como pistola-pluma o bolígrafo y han sido usadas en diversos actos delictivos.
Durante 2016, la SSP decomisó cinco pistolas de ese tipo, de acuerdo con la dependencia.
Este diario dio a conocer esta semana que el uso de esta arma de bajo calibre se ha popularizado entre quienes buscan cometer actos delictivos, como lo demuestra el hecho de que el lunes pasado fue confiscada una de esas pistolas a cinco sujetos que asaltaron a comensales del restaurante La Parrillita, en la colonia Del Valle, delegación Benito Juárez.
Ese día, policías locales fueron requeridos a través de una denuncia de las víctimas, luego de registrarse el atraco en el establecimiento de la calle Adolfo Prieto.
De acuerdo con el parte informativo, al llegar al local de comida, los agentes vieron a un grupo de hombres que salía del lugar con un par de cajas de madera en las manos; al detectar la presencia policial, emprendieron la fuga por diferentes puntos.
El encargado del negocio explicó que momentos antes lo habían amagado con un arma de fuego y “acto seguido sustrajeron dos cajas de madera con chapa, donde se encontraba el dinero de la venta del fin de semana”.
Los agentes, además de capturar a los cinco asaltantes, les decomisaron otra arma calibre .45mm.
POR FACEBOOK
Las pluma-pistola son adquiridas, de acuerdo con declaraciones de detenidos con ellas, través del buscador de Facebook tecleando las palabras pluma 22 y poniendo la opción “tienda”. Ahí aparecen decenas de opciones con precios de 800 a mil 200 pesos.
Este diario recorrió varias armerías del Centro Histórico donde esas plumas no se pueden adquirir.
El dueño de un establecimiento explicó que sólo venden cartuchos y reparan armas, siempre y cuando la persona acuda con su permiso de portación de arma de fuego y coincida con el número de serie de la pistola.
“Aquí no se venden armas. Si te das cuenta sólo tenemos exhibidos cartuchos y también reparamos armas, pero si la persona muestra su permiso de la Sedena”, explicó Daniel.
El pasado 3 de abril fue detenido un adolescente de 17 años en posesión de cinco armas calibre .22 mm, tipo pluma y también llevaba mariguana.
La semana pasada fue vinculado a proceso por un juez de Control y llevará su proceso en libertad. Se ordenó una investigación complementaria de dos meses donde se determinará la responsabilidad del joven, quien aseguró que le dieron –no especificó quién– las armas y la droga para venderlas en su escuela.
En tanto, el 23 de marzo dentro del plantel de un Conalep localizado en la colonia Granjas México, delegación Azcapotzalco. “Gerardo”, de 17 años, le enseñaba a un compañero, de 15 años, una pistola tipo pluma que compró en Facebook.
El arma se accionó lesionando a su amigo.
Por este hecho, “Gerardo” fue trasladado a la Fiscalía para la Atención de Niñas, Niños y Adolescentes y luego llevado ante un juez de Control donde su caso permanece en proceso. Su amigo resultó con lesiones leves.