Los conductores que manejen en estado de ebriedad y provoquen accidentes fatales, como el ocurrido sobre Paseo de la Reforma hace unos días, deben pagar con al menos un año de cárcel inconmutable pues se trata de un delito grave y no una falta administrativa, consideró el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Iván Texta Solís.
El legislador anunció que presentará ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) una iniciativa para reformar el Código Penal de la Ciudad de México el cual, si bien establece en su Artículo 242 sanción de tres meses a tres años y medio de prisión para conductores alcoholizados, en la práctica los acusados pueden conmutar su sentencia por multa o trabajo comunitario.
Conducir un vehículo en estado de ebriedad debe ser un delito castigado con cárcel, pues la muerte de personas inocentes lo es, por ello proponemos que la persona que maneje bajo el influjo de bebidas alcohólicas o substancias tóxicas y ocasione daño a terceras personas sea juzgado con todo el peso de la Ley, sobre todo si es reincidente”, consideró Texta Solís.