El director general del Instituto Potosino de la Juventud, Luis Alonso Molina, reconoció que el fenómeno del pandillerismo en San Luis Potosí, es la antesala para integrarse a las filas de la delincuencia organizada.
Además reconoció que los jóvenes, son aún la «carne de cañón», para los grupos criminales y la industria delictiva, pues e incluso incursionan a las pandillas a una menor edad.
El titular del Impojuve, comentó que tan sólo en la Zona Metropolitana, están identificadas al menos 300 pandillas, entre las cuales, hay las que cometen riñas los fines de semana, cuyo saldo en ocasiones es de personas lesionadas.
Dijo que la falta de oportunidades laborales o educativas es lo que ha provocado que los jóvenes, incursionen en ambos fenómenos que repercuten en forma directa en la seguridad pública. “Es un problema grave no sólo de San Luis Potosí sino que ocurre a nivel nacional” agregó.
El titular del INPOJUVE por esa razón destacó el componente que tiene la campaña #Prevenirestachido, con el que buscan la recuperación del tejido social y de los espacios públicos, para evitar que los jóvenes puedan incursionar en el fenómeno del pandillerismo, y con el paso del tiempo, el delincuencia organizada.
Dijo que es trabajo de los padres de familia, para que adquieran su grado de responsabilidad en el cuidado y formación de sus hijos.
