Ante el adelantado proceso sucesorio presidencial, el PRI y el PRD son superados por el PAN y Morena en su posicionamiento frente a la opinión pública. Las críticas del PRI al PAN o a Morena y su líder Andrés Manuel López Obrador no alcanzan la credibilidad que tienen los cuestionamientos al partido gobernante. A su vez, el PRD se ve debilitado y desplazado por Morena a los ojos de la opinión pública, según se observa en la más reciente encuesta a un Diario de circulación nacional.
A más de un año de la próxima elección presidencial, la población con teléfono fijo en su vivienda menciona más al PAN como el partido con oportunidades reales para ganar la Presidencia de la República (55%). A su vez, el emergente Morena ya es citado por 40%. En cambio, el gobernante PRI apenas es señalado por 32% y al PRD muy pocos le dan posibilidades (11%) (gráfica 1).
El PRI enfrenta un complicado panorama para repetir en el poder. Contrario al optimismo expresado por sus líderes en el reciente aniversario del partido, la percepción sobre el tricolor es bastante negativa. Aunque ningún partido principal destaca por ser bien evaluado, el PAN es el que capta mejor opinión promedio. Morena causa mayor discrepancia de opiniones que el blanquiazul, pero no provoca la desaprobación que generan el PRD y, sobre todo, el PRI (gráfica 2).
Pese a que los dirigentes priistas manifiestan que su partido es el que ha hecho las grandes transformaciones para bien del país, la población señala más al PAN (cambios más positivos, 36%). Peor aún, el PRI ha dejado de superar al PAN en la cualidad que el electorado acostumbraba reconocerle, la experiencia para gobernar, además de seguir cargando con el lastre de ser considerado el partido más corrupto (67%) (gráfica 3).
Esta postura negativa de la población hacia el PRI ocasiona que las críticas indirectas de los dirigentes priistas hacia sus principales opositores difieran de las percepciones de la población. En efecto, en lugar de concordar con que alguno de los partidos de oposición representa más el pasado, engaña con ilusiones, conduciría al país al retroceso, “nada de muertito” o promueve más la división, la población señala sobre todo al propio PRI como el que cumple más con esas características. A la distancia, Morena suele ser el segundo partido más referido (gráfica 4).
En cuanto al PRD, en un entorno donde varios de sus miembros prominentes lo han abandonado o han anunciado su apoyo a Andrés Manuel López Obrador como candidato presidencial, la opinión pública ha percibido esta situación y ubica al partido del sol azteca como una organización en debilitamiento por la salida de militantes que se están pasando principalmente a Morena (gráfica 5).
La opinión pública tiende a dividirse sobre si es correcto que militantes perredistas estén anunciando su apoyo a López Obrador en 2018: para 44% esa postura está mal, en tanto que a 36% le parece bien. De todas formas, se piensa que al final, ya en la campaña presidencial, el PRD acabará apoyando al dirigente de Morena como su candidato (65%). Sólo 24% piensa que el PRD tendrá su propio candidato (gráfica 6). El PRD ha dejado de ser el partido que se percibe como mejor representante de la izquierda en México, pues ahora Morena es más mencionado (28% contra 14%) (gráfica 7).
Morena se ha posicionado competitivamente, además de ser visto como el partido más independiente y uno de los más democráticos. No obstante, este partido y su líder López Obrador dividen opiniones entre la población en varias de las críticas que usualmente les lanzan sus adversarios. Por ejemplo, las advertencias en torno a que un eventual triunfo lopezobradorista significaría un salto al vacío para México o la destrucción de lo que se ha construido en el país son compartidas por más del 40% y rechazadas por una proporción parecida. La afirmación de López Obrador de que los mexicanos queremos volver al pasado en muchas cosas también genera posturas encontradas (gráfica 8).
Por su parte, el PAN enfrenta riesgos por percibirse que es un partido dividido en su proceso de selección de candidato presidencial (60%) y también enfrenta la receptividad de la población a críticas que se le han lanzado. Para ilustrar, casi 60% está de acuerdo con que este partido y el PRI son lo mismo (58%). De igual manera, la afirmación de que un gobierno del PAN sería volver al estancamiento económico es respaldada por la mitad (gráfica 9).