Tips para empezar el año ¡con el pie derecho!

Seguramente cada vez que el año llega a su fin te preguntas qué te gustaría hacer mejor o de otra forma el próximo ciclo. Ya se trate de comenzar a hacer ejercicio o bajar de peso, la mayoría de las personas se fijan ambiciosos propósitos de Año Nuevo. Sin embargo, pocos llegan a la meta ya que cometen errores comunes como:
Escoger propósitos demasiado grandes. No está mal pensar en grande, aunque es más probable que renunciemos a la mitad del camino mientras más ambiciosa sea la meta. Para evitar forzarnos al límite y desgastarnos rápidamente es mejor dar pasos pequeños, pero firmes. Por ejemplo, si quieres bajar de peso no te plantees reducir 10 kilos en un mes sino en tres o cuatro.
Plantear propósitos generales. El error se encuentra en optar por propósitos vagos, como «comenzar a hacer ejercicio» o «ganar más dinero». Es importante definir exactamente cuánto se espera conseguir, por ejemplo, si es 30 minutos más de actividad física o 30% más de salario. Por tanto, las metas debería plantearse como «quiero hacer ejercicio por una 1 hora al día» o «quiero conseguir un aumento de 30% de sueldo».
Renunciar pronto. Entre las causas más comunes por las que se abandonan los propósitos de Año Nuevo encontramos no planificar desde el principio y tampoco esperar el lapso necesario para ver resultados. Debes darle tiempo al objetivo, de lo contrario, no se podrá lograr; si esperas cumplir un objetivo demasiado ambicioso en el primer mes, vendrá una desilusión que te lleve al abandono. Recuerda, todo cambio de hábitos requiere esfuerzo y al inicio, suele ser más arduo.
Falta de motivación. El punto fundamental para lograr tus propósitos de Año Nuevo es proponerte algo que te genere una motivación genuina. Si te acecha la duda de cómo mantenerte motivado todos los días, ten en cuenta que necesitas estar conectad@ con lo que te mueve, por lo que tus propósitos deben ser algo que en verdad sea importante para ti. Así, puedes mantener el optimismo en el momento en que se complique llevar a cabo tus planes.
Si quieres cumplir tu lista de propósitos de Año Nuevo con la motivación de las fiestas decembrinas, recuerda ser constante a pesar de situaciones conflictivas, procura reducir el estrés o evitar situaciones que te alejen de tus objetivos.
Resoluciones de Año Nuevo, Tips para empezar bien el año
¿Cómo cumplir los propósitos de Año Nuevo?
Si anteriormente hiciste resoluciones de Año Nuevo que no cumpliste, el inicio de un nuevo ciclo ofrece otra oportunidad para alcanzar estas y otras metas. Si lo que buscas es cuidar tu salud y mejorar como persona, los siguientes tips para empezar bien el año pueden ser de gran ayuda:
Sé realista. La manera más segura de fallar en tus propósitos de Año Nuevo es plantearte metas inalcanzables. Por ejemplo, «nunca volver a comer comida alta en grasas» seguramente será difícil de cumplir. En su lugar, lucha por una meta que se puede conseguir, como «reducir el consumo de frituras y papas fritas».
Planifica con anticipación. No hagas tu lista de propósitos de Año Nuevo en el último día del año. Si esperas hasta el último minuto podrías mantener esa costumbre al intentar llevarlos a cabo. Procura definir metas antes del 31 de diciembre, así podrás meditar qué es lo que en realidad quieres lograr.
Limita tus objetivos. Si tienes 50 metas por cumplir en un año, es muy probable que termines agobiad@ y desistas. Depura tu lista por lo que realmente consideres importante.
Haz un plan de acción para cumplir objetivos. Tu plan puede incluir pasos necesarios para lograr tus metas a corto, medio y largo plazo, así te aseguraras de que tu voluntad no se debilite. Asimismo, plantea estrategias para lograr metas, por ejemplo, decide cómo vas a hacer frente a las tentaciones de saltarte esa clase de ejercicios o comerte ese pedazo de pastel a fin de bajar de peso.
Comparte tus propósitos. No guardes tus resoluciones de Año Nuevo en secreto, informa a familiares y amigos que estarán allí para apoyarte. El mejor de los casos es encontrar a alguien que comparta tu meta, para motivarse el uno al otro.
Sigue tu progreso. Las metas de Año Nuevo a corto plazo son más fáciles de mantener y llevar un registro de cada pequeño logro ayudará a mantenerte motivado. Por ejemplo, en lugar de centrarse en la meta global de perder 5 kg., se centran en la pérdida del primero. Mantén un diario para ayudarte a seguir en el camino.
Prémiate. Esto no significa que puedas comerte una caja entera de chocolates si tu propósito es bajar de peso y llevas un kilo abajo. Puedes celebrar tus avances con algo que no contradiga tu resolución, por ejemplo, si buscas mejorar tu salud recompénsate con nueva ropa para hacer ejercicio o realizarte un chequeo médico de rutina.
No te rindas. Los expertos dicen que toma 21 días para que una nueva actividad se convierta en hábito y 6 meses para que pase a ser parte de tu personalidad, así que sé persistente y paciente. Asimismo, obsesionarte por un desliz ocasional no te ayudará a lograr las metas de Año Nuevo, por lo que evita atormentarte: haz lo mejor que puedas un día a la vez.
Sigue intentándolo. No desesperes si te has quedado sin voluntad para lograr metas a mitad de febrero, ¡empieza de nuevo! Renueva tus propósitos por 24 horas más, así será más fácil cumplirlos y se encadenarán uno a otro. Antes de que lo sepas estarás de vuelta en el camino.
Medita bien tus resoluciones de Año Nuevo y olvídate de reciclar los objetivos de años anteriores. No olvides tomar en cuenta resoluciones que mejoren tu salud, como hacerte un chequeo médico, dejar de fumar, reducir el estrés, cuidar lo que comes y hacer ejercicio.

¡El momento perfecto para trabajar en tu lista propósitos para el 2017 es ahora!, así que comienza a escribir (si conservas escritas y visibles tus metas, será menos probable que se te olviden). ¡Feliz año!