Recomiendan el ahorro y el pago de deudas frente a 2017: Investigador

Son muchos los propósitos que cada fin de año se meten a la lista, para empezar 2017 y decirle adiós al Año Viejo.

Desde bajar de peso, viajar más o hacer ejercicio, hasta cambiar de coche o comprar casa, dependiendo de cada persona.

Pero uno de los propósitos que debe hacerse la gente es empezar con un plan de ahorro, para solventar los imprevistos y no tener la necesidad de saturar las tarjetas de crédito.

El profesor investigador del departamento de Finanzas del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Daniel de Loera Robles, invita a la gente a empezar con un cinco a 10% de ahorro de los ingresos mensuales o quincenales, y meterlos a una cuenta.

“De acuerdo a estudios económicos a nivel mundial, normalmente se podría pensar que un país que tiene buena capacidad de cultura del ahorro es aquel en que sus trabajadores destinan entre el 10% a 15% de sus ingresos al ahorro; en nuestro país, creo que con las circunstancias económicas que estamos viviendo, sería muy atractivo que una persona pudiera considerar entre 5% a 10% para destinarlo al ahorro en forma permanente”.

Este ahorro debe convertirse en una práctica común y a partir del sueldo que queda, hacer los planes para el alimento, vivienda y vestido, que generalmente se lleva entre 60 y 70% de cada salario.

Sin embargo, menciona que la realidad es que el ahorro se puede dar en las personas que ganan a partir de los tres salarios mínimos, porque los que ganan de uno a dos, aunque quisieran no tienen la capacidad para guardar una parte del sueldo.

“Para quienes no tienen la capacidad de hacer un ahorro, la sociedad mexicana ha aprendido a ser más selectiva en el consumo; y mientras no traigamos dinero, se nos limitan las ganas de comprar”.

EN DETALLE

Básico, traer sólo el efectivo justo

El profesor Daniel de Loera Robles también aconseja que no se traiga más dinero del necesario en la cartera y que la tarjeta de crédito esté guardada en casa; que sólo se cargue con lo necesario para el transporte, alimento y algún imprevisto, para poder tener menos tentación de comprar.