IMPUNIDAD DESCARADA. Ahora sí taxistas y autoridades se pasaron de la raya, todo ciudadano de SLP sabe que los taxistas actúan con total impunidad en cualquiera de sus fechorías, pero lo que hicieron la madrugada del viernes sí rebasa los estándares de tolerancia. Una cosa es manejar como locos en las calles, veloces parándose donde quiera y como quieran, pero otra cosa muy distinta es comportarse como vándalos sembrando el terror en la ciudad, causando destrozos en propiedad ajena y, todavía cometer intento de homicidio y que las autoridades no hagan completamente nada en contra de ellos. De una barbarie como es el taxismo se puede esperar cualquier cosa, pero de las autoridades, bueno, ahora parece que también.
RAZONES DE PESO. En México siempre ha tenido más peso lo político que lo legal, esa puede ser la razón por la que el gremio de los taxistas siempre goce de impunidad en cualquiera de sus actos, por muy descarados que éstos sean. Y razones de peso para sacar estas conclusiones hay de sobra, entre ellas puede ser que políticos y servidores públicos tienen en su poder verdaderas flotillas de taxis. Otra razón, es que cada vez que hay un proceso electoral los taxistas son buenos para hacer ruido, para movilizar votantes y, traer impresa propaganda de candidatos oficiales.
SECTOR EXPLOTADO. Ahora, también hay que ver que un taxi no sólo son fierros, también hay que reconocer que muchos de los conductores de estos vehículos tienen familia que mantener, y que cumplen ordenadamente con su trabajo. Hasta se han convertido en una fuente importante de empleo para profesionistas desempleados ¿Cuántos de ellos se han tenido que meter a conducir un taxi porque nada más no encuentran trabajo? o simplemente para completar el gasto de la casa. Otra realidad es que a los operadores los explotan los dueños de las concesiones y los termina de exprimir la misma SCT, pues ésta se hace sorda y ciega de los reclamos de la ciudadanía cuando se queja de cobros excesivos o de los carros viejos e incómodos que andan en servicio, aunque presuntamente, nada es gratis en ese ambiente.
BALANZA. Otra cosa importante que las autoridades deben considerar para que los consumidores no salgan perjudicados son las tarifas que deben regir en ambos servicios, tanto para taxistas como para los operadores de Uber. Esta es una buena oportunidad para que el delegado de la PROFECO se sacuda la modorra que agarró durante seis largos años en la Secretaría del Trabajo y alerte a los usuarios que Uber tampoco es la perita en dulce que todos piensan. En estos momentos el papel de víctima le ha caído muy bien, pero debe explicar el por qué una corrida que un taxi tradicional cobra 50 pesos, con ellos la misma ruta va a llegar a costar hasta 180 pesos.
YA ME VOY YA HICE MI MALDAD. Nada como la sabiduría popular en México, y el viejo refrán que dice “ya me voy, ya hice mi maldad” le viene re que te bien a los diputados de la LXI Legislatura local, pues en la última sesión que realizaron causaron más revuelo que en todo el tiempo que llevan en sus curules. La tremenda aplanadora que usaron para autorizarle al gobernador todo cuanto quiso y rechazarles a los alcaldes, todo cuanto querían, más lo de los taxistas, que casi incendian la ciudad y, como si aquí no pasara nada, se fueron de vacaciones. Bien lo dijo la Diputada Graciela Gaitán, no pasa nada.
AUMENTAN TARIFA.- Es curioso que se hable de prorrogar el incremento a la tarifa del transporte público urbano, cuando desde hace meses los choferes de ese servicio cobra ocho pesos, en lugar de los 7.80 que tienen autorizado, es decir, los camioneros por sus pistolas simplemente redondearon a su favor el costo del pasaje, ahora falta a ver cuánto extra les autorizan, para a cuanto ellos vuelven a redondear, se trata de un círculo vicioso, el simplemente se podría terminar cuando se implemente el pago electrónico, y las personas de la tercera edad, así como los estudiantes, que tienen tarifa preferencial, deberán cargar su credencial.
APAGA FUEGOS. El que anduvo muy movido antes y después de que el Congreso aprobara la Ley de Ingresos y Egresos del gobierno para el 2017, fue el Secretario de Finanzas, José Luis Ugalde Montes. Se ve que traía la encomienda de arriba de no descuidar en nada a ningún legislador, para que a la hora de la hora no fuera a salir alguno de ellos con una “rasurada” al gasto, de esas nada más para hacerse notar.
