“Una camada de espíritus sofisticados” Danubio Torres Fierro

Ponerle caras a la literatura. Esta “manía” que Danubio Torres Fierro (1947) tuvo desde que era un lector adolescente se ha cumplido con creces y profundidad en su libro más reciente, Contrapuntos, en el que reúne los diálogos sostenidos con 30 escritores iberoamericanos a lo largo del último medio siglo.

El escritor y crítico literario uruguayo no sólo conoció los rostros de los narradores y poetas más importantes de esta región unida en su mayoría por el idioma español, sino que leyó sus obras, entró a sus casas y, por decirlo de alguna manera, los desenmascaró, ideológica y sentimentalmente hablando.

“Siempre me gustó conocer a los escritores y ver qué esconden detrás de esos mascarones que se inventan. Y, en ese trámite de escudriñar esas máscaras, ver cuál es la diferencia que hay entre su comportamiento público y privado”, afirma aExcélsior en entrevista exclusiva.

A quien fue secretario de redacción, de 1974 a 1976, de la revista Plural que publicó El Periódico de la Vida Nacional durante cinco años, siempre le interesó saber si el hombre y el escritor son diferentes, si hay un hombre que vive y otro que crea, si son dos o uno mismo.

Esta inquietud dio vida a este volumen de 395 páginas publicado recientemente por Taurus. “El libro tiene que ver con algo esencial para la literatura: ese juego y esa dinámica entre el autor, la figura que éste proyecta públicamente, y esa otra figura tan enigmática que se llama ‘la persona dramática’. Esa trinidad es muy importante dentro de la historia de la literatura y dentro de la teoría literaria. Las entrevistas tienen que ver con el funcionamiento de esa trinidad”, explica.

El creador de diversas revistas y suplementos culturales está convencido de que es más importante conocer al hombre que a quien escribe los libros. “Para mí siempre fue vital acercarme a la persona humana, porque era una manera de entrar en una relación no sólo meramente profesional, sino de amistad y cercanía.

“Me importaba hacer un libro que no tuviera nada que ver con la academia ni con el conocimiento o la teoría de la literatura, sino que hubiera unas voces que fluyen de manera espontánea en los diálogos que voy teniendo con ellos, pero dando lugar a una naturalidad del escritor”, agrega.

Así, Torres Fierro crea una especie de mapa, “de cartografía de toda una época de la literatura iberoamericana”, a través de entrevistas con literatos de la talla de Octavio Paz, Gabriel García Márquez, Juan Carlos Onetti, Mario Vargas Llosa, Carlos Fuentes, Juan Goytisolo, Adolfo Bioy Casares, Silvina Ocampo, Guillermo Cabrera Infante, Jorge Edwards, Haroldo de Campos, Ernesto Sabato, Severo Sarduy, Salvador Elizondo y Nélida Piñón, entre otros.

Y confiesa que uno de sus tesoros es la charla con García Márquez, una de las pocas que dio en su vida el Nobel de Literatura colombiano. “La entrevista de Gabo se la pidió Octavio Paz y él accedió a que yo la hiciera. Fui a su casa en la calle de Fuego (Jardines del Pedregal, en la Ciudad de México) y estuve toda una tarde con él. Este diálogo marca a la vez una cercanía y una distancia, porque ésta nunca se pierde. Me gustaba ver cómo estos personajes operaban, se desenvolvían. Y este es uno de los sentidos del libro”, destaca.

Un momento privilegiado

El también secretario de redacción de la Revista de la Universidad de la UNAM (1981-1985) y de la argentina Vuelta Sudamericana (1986-1989) aclara que Contrapuntosno sólo se concentra en el fenómeno literario llamado Boom latinoamericano; sin embargo, sí pone énfasis en éste.

“Lo que me importa es que el lector entienda que ese momento, que fue muy privilegiado de nuestra literatura, era como si cada uno de estos escritores estimulara al otro. Había como una carrera de estímulos.

“Entre 1968 y el final del siglo XX, lo que esta gente publicó fue prodigioso. Una novela tras otra, un libro de ensayo o de poesía tras otro. Era como si estuvieran estimulados. Eso fue vital”, señala.

Llama a los escritores de esa época “la tribu de los sensibles” y “camada de espíritus sofisticados” que hicieron realidad un fenómeno único e irrepetible. “ElBoom fue la última revolución literaria que apadrinó el continente. Todos los escritores del Boom creen, con excepciones contadas, en el destino común de la América Latina”.

El autor de El humorismo y la crónica en la literatura uruguaya (1968) advierte que había una idea de América Latina que reverberaba en los literatos. “No era una idea militante, sino moral. El escritor tiene que saber que hay un público que lo va a recibir, que alguien está esperando lo que él diga. Ningún escritor escribe sobre la nada, hay que tener una geografía que puede ser física o espiritual. Debe estar desde el comienzo, es una referencia fundamental.

“Entonces, aunque no todos creyeran en la idea de una Latinoamérica unida, sí sentían que existía una especie de referencia latinoamericana que se afincaba en Cuba, en México o en Chile. Muchos estuvieron exiliados y conocían la experiencia y la importancia de pertenecer al subcontinente”, indica.

El autor de Los territorios del exilio (1979) destaca, en este sentido, la “gran vocación latinoamericana” del mexicano Carlos Fuentes, timonel de este sentimiento. “Este título es primero una celebración de un momento de la vida literaria de América Latina, España y Brasil. Un momento muy inexplicable, irrepetible, misterioso.

“Pero también es un duelo, porque es una etapa que ya está cancelada, que concluyó con el siglo XX. Es un momento que se cerró, que no sabemos si se repetirá o no. Es un volumen que está vivo, que se enciende, y a la vez es una gran elegía por un momento que concluyó”.

Añade que se dio una especie de “arte poética”, debido a que la mayoría de estos narradores fueron muy amigos y tenían una fraternidad literaria entre ellos. “A pesar de que más tarde las ideas políticas los alejaron, había un magma y todos ellos se sentían estimulados. Es un arte poética donde hay convergencias y divergencias, donde hay correspondencias y desencuentros. Los puntos de vista que defiende cada uno son distintos; pero, lo que se recoge de la totalidad de las entrevistas es un arte poética que comandó el gran moviendo del Boom y sus alrededores”.

Las clases medias

Torres Fierro comenta que hubo dos aspectos de vital importancia que caracterizaron al Boom: la relación que existía entre los escritores que formaban parte de este movimiento y el surgimiento de unas clases medias que eran las escuchas naturales de su obra; y la existencia de revistas y suplementos culturales, que fueron importantes como centros de gravitación literaria.

“La literatura son los libros, lo que leemos, pero tan importante como eso es el sentimiento que el lector debe poner primero para leerlos y luego para acercarse a la literatura y al hombre como escritor. Ninguno de estos autores podría existir sin esta subclase social que se reconoció en sus escritos.

“El Boom y sus alrededores no se entienden sin poner dentro de su marco de actuación a una clase media. A pesar de las calamidades políticas que hubo en el continente, llevó a una conciencia democrática progresiva”, asegura.

El autor de Memoria plural. Entrevistas a escritores latinoamericanos (1986) narra que estos dos fenómenos son los legados más importantes de la generación de escritores que sacudieron a Iberoamérica con sus letras durante la segunda mitad del siglo pasado.

“Amén de los grandes títulos había esta circulación de las ideas, de lo que se hacía y cómo se hacía. Era una cosa viva. Tiene una referencia histórica fundamental. Hay dos legados importantes: los libros que promovieron en el lector el reconocimiento crítico y activo de la realidad y de sí mismo; y el descubrimiento de que para llegar a reclamar un cambio social, la intervención de las clases medias es vital”, cuenta.

Quien en 2007 publicó la antología Octavio Paz en España, 1937 lamenta que las clases medias latinoamericanas hoy “están sufriendo una especie de condenación sociológica, están siendo arrinconadas. Esto es peligroso, hay que defenderlas”.

Torres Fierro detalla que, como parte de este proceso de concientización, fue surgiendo el intelectual que opina, observa y cuestiona. “Fueron escritores que tenían la nueva sangre democrática que amaneció en el mundo a mediados del siglo XX. Ahí nace. Todos sienten que deben ser la conciencia de la sociedad, que deben provocar consecuencias en ella.

“Paz, por ejemplo, descubrió que él tenía que convertirse en una referencia importante de esas clases medias, por eso se propuso hacer la reflexión de El laberinto de la soledad. La conexión de estas figuras y la clase media se vuelven vitales”, añade.

También fue esto, continúa, lo que motivó a algunos escritores, como García Márquez, a acercarse a figuras del poder como el recién fallecido Fidel Castro, líder histórico de la Revolución cubana.

“Pero no a todos les pareció bien. De hecho, por eso las nuevas generaciones de literatos no quieren saber nada de esto y permanecer alejados, un tanto aislados. Vieron cómo la política es la que mandaba y la literatura iba perdiendo su lugar”, prosigue.

Danubio Torres Fierro se siente satisfecho de que su “vocación de gitano”, que lo motivó a vivir durante varios años en diversos países, le haya permitido hacer un libro como este.

“Las entrevistas fueron hechas en Barcelona, Madrid, Nueva York, Londres, México y Argentina, entre otras naciones. Cubren toda una geografía. Son a la vez retratos sentimentales, donde algo dejó ver de mi relación con estas personas. Lo que importa de los libros es qué modifican en ti.

“Lo primero que procuré es que hubiera una empatía entre el entrevistado y quien entrevista. Eso es fundamental, porque primero revela una comunidad espiritual, luego una especie de confianza por parte de ambos. Y después se van revelando, a medida que cada entrevista avanza y se desarrolla, las verdades más íntimas y menos formuladas de cada uno de los escritores”, afirma.

Más que entrevistas o charlas, prefiere llamar “diálogos” a estas conversaciones que se extendieron a los largo de 50 años. “Diálogos en el sentido platónico. Un intercambio de ideas donde se plantea una tesis, una antítesis y una síntesis. Para demostrar que el intercambio de ideas es aún una fuerza que puede mover el mundo”, concluye.

Habitantes de este universo

TÍTULO: Contrapuntos

AUTOR: Danubio Torres Fierro

EDITORIAL: Taurus, España 2016, 395 pp.

Estos son los autores con los que charló Danubio Torres Fierro. Todos ellos conforman una cartografía literaria de medio siglo.

  • Gabriel García Márquez
  • Octavio Paz
  • Juan Carlos Onetti
  • Mario Vargas Llosa
  • Victoria Ocampo
  • Carlos Fuentes
  • Juan Goytisolo
  • Adolfo Bioy Casares
  • Manuel Puig
  • Silvina Ocampo
  • Guillermo Cabrera Infante
  • Juan Benet
  • João Cabral de Melo Neto
  • Jorge Edwards
  • José Bianco
  • Haroldo de Campos
  • Jaime Gil de Biedma
  • Nélida Piñon
  • Ernesto Sabato
  • Severo Sarduy
  • Salvador Elizondo
  • Julieta Campos.
  • Carlos Barral
  • Blanca Varela
  • Juan García Ponce
  • Reinaldo Arenas
  • Olga Orozco
  • José Ángel Valente
  • Alfredo Bryce Echenique
  • Luis Goytisolo