Descubren en Tlatelolco templo prehispánico dedicado al dios del viento

Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) descubrieron en la Zona Arqueológica de Tlatelolco una estructura aparentemente dedicada al dios del viento Ehécatl-Quetzalcóatl, la cual próximamente será abierta al público.
En conferencia de prensa y recorrido por el sitio se informó que el descubrimiento, donde se han hallado casi 30 entierros humanos y 43 mil objetos arqueológicos, mil de ellos completos, amplía la zona monumental hasta un nuevo horizonte del que todavía se desconoce su límite.
Los especialistas resaltaron la importancia del descubrimiento e indicaron que se presume que el basamento fue dedicado al dios del viento por los objetos encontrados en el sitio.
Precisaron que entre los 43 mil vestigios se hallan una osamenta de recién nacido, huesos de aves, espinas de maguey, restos de copal, una cuenta circular de piedra verde, además de una olla cercana al sitio con malacates, incensarios y figuras de cerámica con representaciones de monos y picos de pato relacionados con la divinidad.
Esta nueva construcción presenta particularidades: la primera de sus tres etapas constructivas data de los años posteriores a la fundación de la ciudad, 1337 d.C., y tiene paredes bicónicas (inclinadas en vez de rectas), lo que la distingue del resto de las ruinas prehispánicas de la Plaza de las Tres Culturas.
Sobrepuesta a esta fase está la segunda etapa (entre 1376 y 1417 d.C.), que es la más visible del conjunto; de la tercera (hacia 1427 d.C.) sólo quedan desplantes alrededor de la edificación, lo que pudo ser ocasionado por construcciones en el lugar del siglo XX, y aparentemente hay una cuarta fase.
Añadieron que en octubre pasado fue hallado el cráneo de un adulto de sexo masculino, junto al cual se encontró un bezote que debió portar en el labio.
Cabe destacar que también de igual forma, destacaron, debido a la importancia de este descubrimiento el Consejo de Arqueología decidió abrirlo a la vista del público, por lo que se harán las adecuaciones necesarias para abrirla como una ventana arqueológica, con todos los beneficios que implica, con miras a la calle de Ricardo Flores Magón.