Charros encendió sus cañones a la hora buena y volvió a dejar tendidos en el terreno a los Venados de Mazatlán, a los que les remontó una desventaja de 0-6, para terminar ganando 8-7 ante el delirio de los más de nueve mil aficionados que se dieron cita en el Estadio de los Bigotones.
Con la victoria, los Charros se llevan su primera serie de la segunda vuelta y hoy pueden completar la limpia sobre los Venados.
Marco Tovar regresó a la loma de las responsabilidades en casa, pero el de Tijuana lució débil y descontrolado, por lo que el desenlace de la noche para el lanzador de Charros era más que predecible.
Así, la visita le encontró rápido la pelota a Marco y desde la primera entrada Venados le hizo cuatro carreras, con el aporte estelar de Yunesky Sánchez, que le depositó la pelota en el estacionamiento con dos a bordo.
El ataque de Venados mantuvo el castigo sobre Tovar en la parte alta del segundo rollo y le hicieron dos carreras más, por lo que la grúa se llevó a Marco sin poder completar dos entradas.
A partir de ahí, ya con Manuel Flores en el centro del diamante, Jalisco construyó su regreso en el partido.
En la parte baja del tercer episodio Charros acortó distancias de la mano de dos de sus baluartes.
Primero, Amadeo Zazueta remolcó a Alberto Carreón con sencillo para abrir la pizarra por los locales.
Enseguida, el “Manny” Rodríguez depositó la esférica detrás de la barda con un tablazo salvaje por todo el jardín derecho, con Zazueta y el “Mosco” a bordo para el 4-6.
Dos carreras parecían tarea fácil para regresar al juego, pero lejos de acercar a su gente a zona prometida, Charros cometió un pifia en la alta de la sexta cuando Arthur Charles malabareó una pelota con la que sacaba el tercer octubre a cambio llegó la séptima para los mazatlecos.
En la parte baja de la séptima Charros dejó hombres en segunda y tercera y en la octava no pasó nada con los cañones azules.
En la novena, sin embargo, se encendieron los toletes de los de casa, con un ataque constante sobre el pitcheo de Mazatlán. Como una noche antes, Japhet Amador impulsó la del empate con un roletazo de botes salvajes que provocó un fuerte choque en las paradas cortas de Venados.
Después, con la casa llena, Agustín Murillo conectó fly al jardín central, no muy profundo. Zazueta se subió a la motocicleta y entró sin vacilar a home para decretar el triunfo de los Charros.