Injusto desperdiciar alimentos cuando hay millones con hambre: Barrera

 

El presidente de la Directiva del Congreso del Estado diputado Manuel Barrera Guillén entregó un donativo de 218,800 pesos al Banco de Alimentos, en el marco del evento oficial de arranque del Día Mundial de la Alimentación realizado en la Alameda Juan Sarabia, con la presencia de autoridades y representantes de sectores sociales.

El legislador, que mensualmente apoya a dos mil familias a través de esta organización, señaló que lo seguirá haciendo porque es injusto que en San Luis Potosí haya un millón de personas con hambre, mientras que las grandes cadenas comerciales siguen aplicando “la barredora”, que es tirar a la basura cientos de toneladas de comida diariamente que no logran vender.

En su mensaje ante los asistentes, Barrera Guillén recordó que desde hace siete años que empezó como funcionario público en la Secretaría de Ecología conoció la función del Banco de Alimentos y constató el gran desperdicio de comida que podría ayudar a miles de familias, “y si todos colaboramos podremos salvar a muchas personas de las condiciones de abandono e incluso, lograr que trasciendan y sirvan a la sociedad”.

“Me enteré que hay otras instancias que también promueven este tipo de eventos e incluso se vuelven competencia, pero nadie ganará si no vamos todos juntos, por eso cuenten con todo mi apoyo, lo seguiré haciendo mensualmente hasta que termine la Legislatura y espero seguir participando en un futuro”.

En el evento estuvo presente la diputada Josefina Salazar Báez, quien también ofreció su respaldo y todo el apoyo institucional para generar condiciones que combatan el hambre.

Recientemente, los diputados de la Comisión de Salud y Asistencia Social, aprobaron la reforma a diversos artículos de la Ley de Asistencia Social del Estado para reconocer en la legislación a los bancos de alimentos y las organizaciones donatarias de alimentos, quienes realizan la labor de recibir y entregar los productos alimentarios para satisfacer las necesidades de las personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad.

Mediante esta reforma se otorga al DIF Estatal la obligación de promover la asistencia alimentaria y coordinarse para tales efectos con las organizaciones y bancos de alimentos; además, promoverá el reconocimiento público de personas físicas o morales como donantes, especialmente de aquellos que se hayan  distinguido por sus contribuciones a favor de las personas o grupos en situación de vulnerabilidad alimenticia o de pobreza alimentaria, como personas o empresas  socialmente responsables.