En México existen 817 municipios que tienen alto grado de marginación de los dos mil 456, y según datos del INEGI, poco más de mil municipios tienen al 75 por ciento de su población en pobreza.
Aseguró lo anterior el vicepresidente del Senado de la República, Octavio Pedroza Gaitán, quien presentó un punto de acuerdo para solicitar a la Cámara de Diputados destinar una partida especial en el Presupuesto de Egresos 2017, para que municipios con alta marginación elaboren proyectos ejecutivos que les permitan gestionar recursos adicionales y atender sus necesidades más apremiantes.
El objetivo de esta propuesta, es que los municipios marginados “tengan las mismas oportunidades que los ricos y con eso disminuir el círculo vicioso de la pobreza en los ayuntamientos mexicanos”. Mediante un punto de acuerdo, Pedroza Gaitán aseguró que asignar una partida en el Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2017, que permita el diseño de proyectos ejecutivos en los municipios marginados y acceder a recursos adicionales, gestionarlos y ejecutarlos, contribuirá a disminuir la desigualdad y evitar reforzar el círculo de la pobreza en los municipios marginados.
Para resaltar la diferencia que hay entre los municipios pobres y los ricos, Pedroza Gaitán expuso que los ayuntamientos con mayor porcentaje de su población en pobreza son San Juan Tepeuxila, Oaxaca, con 97.4 por ciento; Aldama, Chihuahua, con 97.3 por ciento, y San Juan Cancuc, Chipas, con 97.3 por ciento.
En cambio, los municipios con menores índices de pobreza son Benito Juárez, Quintana Roo, con 8.7 por ciento, y los municipios neoleoneses San Nicolás de los Garza, con 12.8 por ciento; Guadalupe, con 13.2 por ciento, y San Pedro Garza García, con 15.2 por ciento.
La desigualdad entre los municipios, agregó, es evidente también al analizar el índice de rezago social y marginación, pues los municipios más ricos tienen grados muy bajos de rezago social, mientras los municipios más pobres presentan grados muy altos.
Lo más lamentable, dijo, es que del año 2000 al 2010 los grados de marginación y rezago social aumentaron en más del 45 por ciento en los municipios con grados muy altos y altos de marginación.
Asimismo, abundó, el uno por ciento de los municipios más ricos del país genera entre el 25 y 30 por ciento del PIB nacional, mientras que, en el otro extremo, el 40.87 por ciento de los ayuntamientos más pobres contribuye solo con el cinco por ciento de la riqueza producida del país.
Esta situación, concluyó, es cada vez más grave en los municipios marginados, de ahí la necesidad de garantizar un mínimo presupuestal que desactive ese círculo negativo que sólo recrea el círculo de la pobreza.
El punto de acuerdo se turnó a la Cámara de Diputados para su análisis y dictamen.