El jefe de campaña del candidato presidencial republicano, Donald Trump, hizo pública su renuncia luego de la polémica que ha causado las recientes revelaciones de que trabajó en favor de un partido politico ucraniano de tendencia pro rusa.
Según correos electrónicos obtenidos por The Associated Press, Paul Manafort ayudó a un partido pro ruso de Ucrania a enviar clandestinamente por lo menos 2.2 millones de dólares en pagos a dos firmas de cabildeo político de Washington en 2012, y lo hizo de manera tal que ocultó los intentos de ese partido extranjero de influenciar la política estadounidense.
La revelación, suministrada a The Associated Press por fuentes familiarizadas con las gestiones, surge en momentos en que Trump ha enfrentado duras críticas por su actitud amistosa hacia el presidente de Rusia, Vladimir Putin. Además, arroja luz sobre las prácticas de negocios de Manafort.
De acuerdo con la ley en Estados Unidos, los cabilderos políticos deben declarar públicamente si representan a líderes o agrupaciones extranjeras, y deben entregar reportes detallados de sus actividades al Departamento de Justicia. Violar esa norma es considerado un delito grave que acarrea un máximo de cinco años de cárcel y una multa de hasta 250,000 dólares.
La noticia se conoce el mismo día que Trump reorganizó su campaña, al asignar a dos veteranos estrategas conservadores como director ejecutivo y gerente.
Manafort y su socio Rick Gates, otro estratega de la campaña de Trump, trabajaban en 2012 en favor del partido político del entonces presidente de Ucrania, Viktor Yanukovych.
