El Papa recibe a Hollande; tratan terrorismo y extremismo religioso

CIUDAD DEL VATICANO

El papa Francisco y el presidente francés, François Hollande,mantuvieron un encuentro privado en el Vaticano donde conversaron sobre terrorismo y extremismo religioso, entre otros asuntos, comentó el mandatario francés.

La reunión a puerta cerrada entre Hollande y Bergoglio tuvo lugar dos años y medio después de la que mantuvieran en enero de 2014.

El Vaticano no dio detalles sobre el contenido de la reunión, sin embargo Hollande adelantó minutos antes que trataría asuntos relacionados con el terrorismo, los refugiados y el extremismo religioso.

El presidente llegó acompañado de una delegación compuesta por el ministro del Interior de Francia, Bernard Cazeneuve y por el embajador de Francia ante la Santa Sede, Philippe Zeller, entre otros.

Tras la reunión a puerta cerrada, se procedió al habitual intercambio de regalos. Hollande obsequió al papa una porcelana de Sèvres con el escudo de Francia, mientras que el papa Francisco donó al presidente francés una escultura de bronce obra de la artista Daniela Fusco.

Antes de visitar el Vaticano, Hollande se acercó hasta la iglesia de  San Luis de los Franceses en Roma, dónde recordó a las víctimas fallecidas en los últimos atentados terroristas en su país.

Permaneció en silencio unos momentos en una capilla que, desde noviembre pasado –cuando ocurrieron los atentados de Paris- se instaló en memoria de las víctimas del terrorismo.

A su salida, Hollande relató a los medios que tenía la intención de transmitir al papa “un mensaje de gratitud” por sus “palabras de gran consuelo” pronunciadas después de la muerte del sacerdote Jacques Hamel, asesinado el pasado 26 de julio mientras celebraba misa en la localidad de Saint-Etienne-du-Rouvray, en Normandía.

Ese mismo día, el papa Francisco expresó “dolor” y “horror” por la “absurda violencia” del suceso, y un día después afirmó que “el mundo está en guerra porque ha perdido la paz”, pero aclaró que no se trata de “una guerra de religiones”.

El presidente francés reconoció la importancia de estas palabras porque, dijo, “han contribuido a llamar a la unidad de Francia”.

Es importante decirle al papa que somos sensibles a su palabra”, agregó.

Defendió que su país “garantiza la libertad de todas las religiones”, así como la libertad de creer o no creer”, y sostuvo que, entre otras preocupaciones, también abordaría con el papa el problema del extremismo religioso, la crisis de los refugiados y la situación de los cristianos en Oriente Medio.