CIUDAD DE MÉXICO.-Con el respaldo del diputado Víctor Hugo Romo Guerra y el presidente del PRD en la Ciudad de México, Raúl Flores, un grupo de abogados presentó una denuncia contra la delegada en Miguel Hidalgo, Xóchitl Gálvez, su ex “city manager”, Arne aus den Ruthen, y quienes resulten responsables.
La denuncia que se realizó ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal presume que tanto la delegada Gálvez como su ex “city manager” incurrieron en uso ilegal de atribuciones y facultades, tráfico de influencias, peculado y enriquecimiento ilícito.
Antes de presentarla, el diputado Víctor Romo explicó que la denuncia es por violar la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos al encubrir a su ex colaborador, Arne aus den Ruthen, por contratar a personal de su empresa.
Se trata, dijo, de prestarle a trabajadores públicos con fines privados y también por protegerlo y no verificar la construcción del inmueble ubicado en Tiburcio Montiel 16 y 18, colonia San Miguel Chapultepec.
Refirió que existen pruebas contra el ex funcionario y de la jefa delegacional de quedesvían recursos públicos, económicos y humanos, para auxiliar en las transmisiones de Arne, así como meter a una parte de la plantilla de trabajadores de la empresa Atlantis a laborar en la delegación.
Es un hecho que en la delegación Miguel Hidalgo existe una clara protección y favoritismo hacia Arne aus den Ruthen”, indicó Víctor Hugo Romo.
«Los hechos que ha documentado la prensa, agregó, confirman que los servidores públicos que colocó Arne en la delegación, bajo el amparo de Gálvez Ruiz, son sus ex empleados que trabajaron en la empresa Atlantis, propiedad del ex city manager”, explicó Romo.
El diputado local dijo que «lo grave» es que la mayoría de esos trabajadores no tiene experiencia alguna en la administración pública y en términos reales siguen bajo el mando de Arne.
Lo anterior, abundó, a pesar de que tiene más de un mes de que presentó su renuncia al cargo, sin embargo, sigue utilizando recursos y personal de la delegación con fines estrictamente personales y políticos.
Recordó que la funcionaria Amada Rodríguez Ibarra, ahora city manager en la delegacional, “puesto que le dejó Arne”, fue asistente en la empresa Atlantis, incluso llegó a ser apoderada de la compañía, lo que calificó de “sospechoso y poco común, además de que tiene una nula experiencia en la administración pública”.