Alemania revela detalles del kamikaze: juró lealtad a ISIS y almacenó explosivos

El sirio que se hizo explotar el domingo de noche cerca de un festival de música en Ansbach en Alemania (sur) había jurado lealtad al grupo yihadista Estado Islámico (EI), de acuerdo al contenido de un videoencontrado en su teléfono móvil, anunció este lunes el Ministerio del Interior bávaro.

Anunció explícitamente (actuar) en nombre de Alá, y jura lealtad (al jefe del EI), Abu Bakr al Bagdadi (…) y advirtió expresamente una venganza contra los alemanes que se atraviesan en el camino del Islam», declaró Joachim Hermann, apoyándose en una primera traducción de este video en árabe, al día siguiente de este atentado con explosivos que provoco 15 heridos y mató a su autor.

Según Hermann, el hombre decía que se trataba de una venganza contraAlemania por interponerse en el camino del Islam y por la muerte de musulmanes.

Casi simultáneamente, en una comparecencia en Berlín, el ministro federal del Interior, Thomas de Maiziére, dijo que no se podía descartar ni que hubiera una motivación terrorista ni que el acto hubiese estado suscitado por la inestabilidad psíquica del hombre.

Según explicó Maiziére, el hombre, de 27 años, entró en Alemania en agosto de 2014 tras pasar por Bulgaria y Austria y solicitó asilo en el país, pero su petición se rechazó en diciembre tras comprobarse que ya había recibido «protección subsidiaria» en Bulgaria.

Además, había intentado suicidarse dos veces y había estado en tratamiento psiquiátrico.

HALLAN MATERIAL EXPLOSIVO

La policía alemana informó que halló diversos materiales susceptibles de ser utilizados para fabricar bombas en la habitación que ocupaba en un albergue de Ansbach el solicitante de asilo sirio que ayer se inmoló.

En rueda prensa para presentar los últimos detalles de la investigación, la policía explicó que encontraron, entre otros materiales, un bidón de gasolina, ácido clorhídrico, pilas, alambres y guijarros, además de un ordenador portátil con imágenes de violencia relacionadas con el grupo terrorista Estado Islámico.

El hombre, que contaba hasta con seis perfiles en Facebook, tenía además un ordenador portátil con imágenes de violencia relacionadas con el grupo terrorista Estado Islámico, dos teléfonos móviles, varias tarjetas SIM y un «fajo de billetes de 50 euros».

La explosión, que lanzó piezas de metal a veinte metros de distancia, le destrozó la aorta, el pulmón y el hígado y murió de forma inmediata.

En la autopsia se ha descubierto que el hombre, originario de Alepo y de 27 años, tenía heridas de guerra en las piernas y los pies, aunque Fertinger señaló que todavía hay que investigar si había participado en combates en su país.