- Más que un diputado el legislador priísta se comporta como un arlequín, violentando el reglamento interno del Poder Legislativo
- Rompió la solemnidad de la sesión, al ponerse a bailar al ritmo de cumbia que tocaba un grupo callejero que irrumpió en el recinto legislativo, obligando a que se declarara un receso
Nuevamente el salón de pleno del Congreso del Estado se convirtió prácticamente en un circo de dos pistas, en esta ocasión por las manifestaciones y protestas que se realizaron tanto en el interior como en el exterior y el bochornoso espectáculo que protagonizó el diputado, José Luis Romero Calzada, quien sin impórtale respetar el reglamento interno del Poder Legislativo rompió la solemnidad de la sesión, al ponerse a bailar, al ritmo de cumbia, que tocaba un grupo callejero que irrumpió en el recinto.
La “ocurrencia” del polémico y conflictivo legislador priísta, causó malestar entre sus compañeros diputados, pues sin importarle el desarrollo de la sesión se paró y se puso a bailar, provocando el total desorden dentro del salón de plenos.
Inútilmente, la presidenta de la Mesa Directiva, Josefina Salazar Báez, pedía que los legisladores volvieran s sus curules, pues mientras esto sucedía Romero Calzada, sacaba sus “pasitos domingueros” e incluso, en el colmo del cinismo, invitó a bailar a una señora.
A “Romero el bailador” se acercó el diputado Alejandro Segovia, aparentemente para llamarlo al orden, pero este en vez de detenerse lo invitó a bailar, por lo que el legislador se negó y se concretó a saludar a los músicos, mientras que Josefina Salazar, viendo que era imposible restablecer el orden, declaró un receso en la sesión.
Casi al término de la canción Romero Calzada les dijo a los músicos callejeros, quienes aparentemente acudieron a manifestarse en contra de los elementos de la Dirección General de Seguridad Pública Municipal, que les impiden trabajar en la vía pública, que lo atendería en otro lugar del Congreso.
La sesión se reanudo minutos después y en la cara la mayoría de los Legisladores se veía el malestar por la acción, propias de un arlequín más que de un diputado, de Romero Calzada.
Cabe destacar que la sesión de este día se desarrolló en medio de manifestaciones de distintos grupos de taxistas, militantes del PAN, comerciantes ambulantes y dl grupo musical de cumbia colombiana.
Fue al mediodía cuando distintos grupos comenzaron irrumpir en la sede del Congreso del Estado, portando pancartas, lanzando consignas.
Los taxistas contra al diputado Sergio Desfassiux, mientras que otro grupo de panistas inconformes con pancartas en mano, acusaban a los legisladores del blanquiazul de traidores.
Más tarde arribaron integrantes de una organización juvenil encabezados por Marco Antonio Hernández, quien recriminó con gritos a la fracción del PRI, señalando que gracias al gobierno federal están matando a maestros y ciudadanos en Oaxaca, además denunció que el comercio ambulante está sufriendo amenazas y atropellos por parte de autoridades municipales.
Diputado José Luis Romero Calzado, el arlequín del Congreso de SLP, convierte sesión en salón de baile