Este oficial repuso las tarjetas de Pokémon que le habían robado a este niño con las de su propia colección, y con ello nos enseña que todavía existen las almas buenas en este mundo en donde las injusticias pasan en el momento menos esperado.
Mientras se dirigía a la casa de un amigo, a este niño de nueve años de edad llamado Bryce, de Cleveland, le fue robado de sus manos su colección entera de tarjetas de Pokémon, situación que como comprenderán convirtió su día en uno muy triste.
Tras lo ocurrido, la madre de Bryce decidió informar a la policía y luego de iniciada una investigación estas aparecieron en el poder de otro niño que vivía en un barrio cercano. Sin embargo, varias de las tarjetas de la colección faltaban y es ahí cuando un héroe local apareció para dar solución finalmente.
Para acabar con la tristeza de este niño, el oficial James Grotenrath decidió entregar su propia colección de tarjetas, entre las cuales había una de la cual estaba particularmente orgulloso. Él indica: “Sólo hay unas 10 de estas en el mundo y tengo uno de ellas“. Añade: “Es un artículo que no tiene precio, pero es mejor ver a otro sonreír
Si se preguntan por esta afición que el oficial Grotenrath, de sólo 26 años de edad, comparte con Bryce, hay una explicación para eso. “Yo crecí con Pokémon. Me encantó Pokémon cuando era un niño y también estaría con el corazón partido si alguien tomara mis tarjetas.”
Ojalá todos fueran como este oficial. Y no nos referimos a que vaya regalando sus cosas. Se trata de tener un poco de atino con el lado emocional de las personas para, por lo menos, de esa manera acompañarlos.