INBA hace homenaje a Elena Garro

Con la obra “Los días petrificados”, basada en su vida y obra, la Coordinación Nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) rindió homenaje a la escritora mexicana Elena Garro (1916­1998) en el centenario de su nacimiento.

Bajo la dirección del dramaturgo Miguel Sabido, los actores Angélica Aragón, Lisbi Cuéllar, Lourdes Gazza, Rosendo Gazpel y Julio Gómez ofrecieron una lectura dramatizada de esta obra en la que se describe la vida de la guionista, periodista, poeta y cuentista poblana.

El acto, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, formó parte del programa “Leo…luego existo”, donde Andrés Torres, director de extensión cultural del INBA, recordó que la lectura es un factor determinante en la vida del individuo y refirió que una persona que sabe leer, además de entender mejor su medio circundante, sabe expresarse de manera clara y precisa.

Gracias al poder de la palabra, el grupo de actores dieron voz a esta célebre escritora, Premio Xavier Villaurrutia 1963 y Premio Sor Juana Inés de la Cruz 1996. “Me llamo Elena Garro, nací en el estado de Puebla. Mis padres fueron José Antonio Garro y Esperanza Navarro, dos personas que vivieron siempre fuera de la realidad, dos fracasados que llevaron a sus hijos al fracaso.

“A mis padres sólo les gustaba leer, ellos nos enseñaron la imaginación, nuestras múltiples realidades, el amor a los animales, el baile, la música y el desdén por el dinero”, con estas palabras la actriz Angélica Aragón, inició su participación dando vida a la autora homenajeada.

“Elena Garro es la mayor desconocida de la literatura mexicana”, afirmó Miguel Sabido, pues para él, a pesar de que la escritora poblana es célebre por su novela ‘Los recuerdos del porvenir’ (1963), hay otros de sus textos que son “verdaderas obras maestras y ni siquiera se sabe de ellos”.

Ejemplo de ello es “La casa junto al río”… claro que “Los recuerdos del porvenir” es un libro indispensable en nuestra literatura, pero existen otros muchos que deben ser rescatados. Quizá la gigantesca dimensión de Elena está más allá de la literatura, consideró.

Destacó que la sesión servirá para atraer los ojos de nuevo a ella, “pues hablamos de la mujer combativa, de la gran novelista, de la extraordinaria escritora de teatro, de la bellísima y elegante defensora de los más humildes, los que tuvimos oportunidad de tratarla en su momento de gloria quedamos enriquecidos”, refirió. Elena Garro es autora de textos que hablan entre sí en una sutil intercalación en la que también se hace presente el realismo mágico con personajes cuya existencia oscila entre lo inverosímil y lo cotidiano, seres que viven situaciones en las que se mezclan los hechos históricos con lo verídico y la ficción.