¡No tengas miedo!: Vacunas en el embarazo

La administración de vacunas en el embarazo busca proteger a la madre y a su hij@ contra ciertas afecciones durante la gestación, lo cual es particularmente importante si consideramos que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades infecciosas representan una de las principales causas de muerte de la mujer embarazada. Además, la vacunación en el embarazo ayuda a mantener al bebé a salvo de enfermedades en los primeros meses de vida hasta que reciba sus propias inmuniza-ciones.
De ahí la necesidad de garantizar inmunidad en la mujer durante la gestación contra ciertas infecciones. De manera que si planeas convertirte en madre por primera vez o piensas agrandar la familia, las vacunas para embarazadas que debes recibir son: Difteria, tos ferina y tétanos. En México, la Secretaría de Salud (SSa) aconseja vacunar a la mujer durante el segundo y tercer trimestre del embarazo, es decir, debe recibir este medicamento entre las semanas 27 y 36 de gestación para traspasar la protección contra la tos ferina (tos convulsa) al bebé, ya que esta afección puede poner en riesgo su vida. Influenza. Se recomienda cada año a personas de los llamados grupos de riesgo, en los cuales las embarazadas están incluidas; se trata de la vacuna de la influenza trivalente inactivada vía intramuscular, y de la vacuna de influenza trivalente inactivada vía intradérmica, la cual es sólo para personas mayores de 18 años. En el caso de la vacuna contra influenza, es importante señalar que las presentaciones inyectables no son vacunas de virus vivos, por lo que los especialistas consideran que se trata de medicamentos que pueden administrarse con seguridad en cualquier momento del embarazo. Por el contrario, la presentación de virus vivos atenuados en spray nasal es una de las vacunas que se deben evitar en el embarazo (está contrain-dicada), de acuerdo con información de la SSa.
Ahora bien, otro importante punto sobre la necesidad de vacunarse en el embarazo se relaciona con la infección vírica del hígado o hepatitis B, especialmente en aquellas mujeres que presentan mayor riesgo de infección debido a que: Han tenido más de una pareja sexual durante los últimos seis meses.
En este caso, los médicos recomiendan como estrategia de prevención la aplicación de la vacuna contra la hepatitis B, la cual no tiene riesgo evidente para el feto.
Recomendaciones previas al embarazo Cuando planeas un embarazo tienes grandes probabilidades de vivir saludablemente todo el proceso y, para ello, uno de los principales factores a tomar en cuenta es tener al día todas las inmunizaciones recomendadas para adultos.
Entre las vacunas antes del embarazo que debes tener están: Vacuna triple viral: sarampión, rubéola y paperas (SRP). El sarampión es enfermedad que causa sarpullido, tos y fiebre; si aparece durante el embarazo puede provocar aborto espontáneo. Por su parte, la infección por rubéola en la mujer gestante puede provocar defectos congénitos graves en el bebé con consecuencias devastadoras durante su vida o, incluso, su muerte antes de nacer. En cuanto a las paperas (parotiditis), es trastorno que se contagia con facilidad y puede originar fiebre, dolor de cabeza e hinchazón de glándulas; rara vez ocurren complicaciones cuando una mujer contrae la afección durante el embarazo; no obstante, existe un riesgo ligeramente mayor de aborto involuntario.
Influenza. Es recomendable que recibas esta vacuna una vez por año antes de la temporada de la influenza (octubre a mayo). Ya sea que te administren la versión inyectable (contiene los virus de la influenza muertos) o en atomizador nasal (contiene los virus de la influenza vivos), cualquiera es segura de administrarse antes de iniciar el proceso de gestación.
VHP (virus del papiloma humano). Esta vacuna protege contra la infección que causa verrugas genitales, las cuales pueden complicar el embarazo, debido a que los cambios hormonales en la gestación provocan que éstas crezcan más y, en ocasiones, a tal grado que bloquean la vagina y haciendo necesaria la cesárea.
Igualmente, es posible que el bebé adquiera el virus y crezcan verrugas en sus cuerdas vocales.
Varicela. Esta vacuna protege contra la varicela, infección de fácil contagio que causa sarpullido en la piel con picazón y fiebre. Durante el embarazo, puede ser peligrosa para el bebé y causar defectos de nacimiento, por lo que conviene recibirla antes de iniciar el proceso de gestación (al menos, durante un mes después de la administración debe evitarse el embarazo).
Beneficios de las vacunas en el embarazo
De acuerdo con autoridades de la Secretaría de Salud, la vacuna triple viral (SRP) o aquellas con componentes de sarampión, rubéola y/o parotiditis no deben administrarse a embarazadas, ya que pondrían en riesgo al feto al exponerlo a virus vivos a través de la aplicación de esta inmunización.

De ahí que se recomiende a la mujer en edad fértil no planear un embarazo en los 28 días siguientes a la administración de cualquier vacuna contra sarampión, rubéola y paperas.

¿Qué vacunas se recomiendan después del embarazo?
Después del alumbramiento, los médicos recomiendan a la mujer ponerse al día con las vacunas para adultos (incluso si están amamantando), con el propósito de protegerla contra enfermedades en embarazos futuros y alejarla de afecciones que pudieran complicar la crianza de su bebé.

Por ejemplo, si no te aplicaron la vacuna contra difteria, tos ferina y tétanos durante el embarazo, puedes recibirla inmediatamente después de dar a luz. Además, debes tomar en cuenta que hasta que tu bebé reciba la primera inyección contra la tos ferina, la mejor manera de protegerlo es que tú te vacunes y lo mantengas alejado de personas que puedan tener la enfermedad.

Si tienes alguna duda sobre las vacunas mientras estás amamantando a tu hijo, consulta al profesional de la salud.

Protección contra enfermedades durante el embarazo
Si quieres convertirte en madre, acude al médico a fin de que te evalúe y realice los exámenes previos necesarios para asegurarse de que tu embarazo comenzará de la mejor manera y llegará a buen término.

El especialista (ginecólogo) te informará si necesitas vacunas o refuerzos; si tienes tu registro de vacunación, llévalo a la consulta para facilitar cualquier decisión y, en caso de no contar con él, es posible realizarte un análisis de sangre para averiguar qué inmunizaciones requieres.

Ser madre es una responsabilidad para toda la vida que comienza, incluso, antes de la gestación. Si has decidido que llegó el momento de dar ese paso y te preguntas qué vacunas se recomiendan durante el embarazo, ahora tienes más información sobre el tema.

No obstante, la mejor decisión en cuanto a las inmunizaciones que requieres, en qué momento recibirlas y, sobre todo, la seguridad de las vacunas, puedes obtenerla del profesional de la salud, ¡acude al médico!