Anciana muere quemada cuando preparaba sus alimentos

Mortal accidente sufrió una mujer de la tercera edad cuando cocinaba sus alimentos, tenía encendida una hoguera y las llamas alcanzaron unas hebras sueltas de su suéter y eso generó el incendio en sus ropas y finalmente le ocasionó la muerte. Los hechos sucedieron en Armadillo de los Infante.
El accidente ocurrió la noche del domingo pasado, cuando fue requerido el Agente del Ministerio Público para dar fe del cadáver de quien en vida llevara el nombre de Francisca N., de 84 años de edad, quien resultara muerta a consecuencia de diversas quemaduras sufridas cuando cocinaba con leña, mientras que la Policía Ministerial del Estado investiga los hechos para saber si hay o no delito que perseguir.
El reporte fue realizado alrededor de las 21:15 horas a la cabina de radio de la Policía Ministerial del Estado, de donde se envió a un grupo de agentes investigadores para que tomaran conocimiento del accidente, registrado en la cabecera municipal de Armadillo de los Infante.
De acuerdo a lo relatado por familiares de la víctima, las lesiones sufridas por la mujer de la tercera edad fueron producidas cuando se encontraba cocinando con leña, en un área de su vivienda habilitada para ese fin.
Dijeron que en el momento del percance, ésta vestía un suéter que tenía sueltas algunas hebras del puño, las que de pronto comenzaron a arder, por lo que al darse cuenta, su hermano José Ascensión, de 86 años, intentó de inmediato apagar el fuego, quitándole la ropa, para entonces la mujer ya tenía quemaduras prácticamente en todo su cuerpo. De inmediato el octogenario dio avisó a sus familiares sobre los hechos, quienes trataron de auxiliar a la accidentada, quien desafortunadamente falleció debido a la gravedad de las lesiones, por lo que luego se dio aviso a las autoridades.
De acuerdo a lo observado por personal del área de peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado, la señora Francisca falleció a causa de una serie de quemaduras de fuego que prácticamente le cubrieron todo el cuerpo, como lo evidenciaban las marcas en cuello, cara, tórax, pecho, brazos, antebrazos, pelvis, cadera, ambos muslos y el pie izquierdo.