A un mes de haber asumido la dirección general del IMSS, Mikel Arriola presentó una serie de medidas para mejorar los servicios que se ofrecen en esta institución.
En entrevista con Adela Micha para Grupo Imagen Multimedia, Mikel Arriola detalló que la primera medida que se plantea para mejorar el servicio al derechohabiente se aplicará en el sitio donde inicia la cadena del proceso de atención: la Unidad Médico Familiar.
Cuando el paciente llegue a la Unidad Médico Familiar (con o sin cita) será atendido ese mismo día”, señaló el director del IMSS.
En el paso siguiente, señaló el funcionario, cuando un médico familiar remita al paciente con un especialista, se acortará el periodo de tiempo para que se realice la cita y ese mismo día se deben realizar los exámenes que se requieran.
En el caso que el paciente requiera hospitalización, la cama se le podrá asignar en un tiempo máximo de ocho horas.
Para abatir el rezago que se tiene en cirugías, se realizará la asignación de quirófanos también los fines de semana, con lo que la capacidad en este servicio aumentará en un 40 por ciento.
En el servicio de urgencias se reducirá el proceso administrativo para que los pacientes puedan ser valorados en un tiempo máximo de cinco minutos.
De aquí al 2018, el IMSS cuenta con 20 mil mdp para la construcción de 40 unidades médico-familiares, así como cuatro hospitales con una capacidad de entre 100 y 150 camas cada uno.
El 20% de las quejas tienen que ver el servicio al público y la instrucción del presidente de la república es muy clara: incrementar la calidad pero también la calidez2 señaló el funcionario federal.
Para avanzar en este sentido, se realizará un programa de capacitación para los trabajadores que tienen contacto con el público.
Mikel Arriola comentó que el IMSS presentó una denuncia ante la Comisión Federal de Competencia para que se determine si hay conductas que puedan afectar al patrimonio del IMSS por una presunta colusión entre laboratorios para ganar una licitación para análisis clínicos y banco de sangre.