Querer tapar el Sol con un dedo es lo que pretenden los distintos legisladores y correligionarios partidistas, al apuntalar la presunta relación con el narcotráfico de Lucero Sánchez; hasta hace unos días diputada de la bancada panista en el Congreso de Sinaloa, quien renunció a la fracción pero no a su escaño.
Los propios senadores del Congreso del país ponen a Sánchez como caso a tomar en cuenta y reabrir el debate respecto a si debe o no flexibilizarse la figura de fuero a los legisladores, es decir, que en caso de ser sujetos de una sanción no debe haber qué lo impida.
En realidad, ese debate será de nuevo sólo una quimera, porque los legisladores locales y nacionales, representan pedacitos de nuestra realidad nacional y en el caso del narcotráfico, no se puede esperar que de los 2 mil 457 municipios, sean apenas unos cuantos los diputados con alguna liga criminal. No hay que espantarnos. Habría que ocuparnos, porque es la realidad.
La misma que a muchos asusta cuando algún diputado toma la tribuna y apenas si sabe leer. En ese caso, no cabe la crítica malsana. Justamente son representantes de sus localidades, muchas de estas olvidadas pareciera hasta de la mano de Dios, en donde apenas si hay una escuela unitaria y a veces sin maestro, e inclusive no hay más que mirar al horizonte sin otra alternativa de conocimiento o entretenimiento.
La presencia del narcotráfico entre legisladores, alcaldes, policías municipales, funcionarios de Gobierno y hasta mandatarios estatales, no es cuestión de partido, es asunto de poder.
Para ser justos el problema de la delincuencia organizada se ha convertido en una constante presente en las distintas regiones del país. La situación del narcotráfico es estructural y llega a todos los espacios de la sociedad, pensar que no se infiltra entre nuestros legisladores que llevan los intereses del crimen hasta las tribunas legislativas y otros espacios de gobierno, es negar una realidad que ya nos supera e irrumpe de manera negativa en la vida de todos los mexicanos.
El crimen organizado debilita todas las instituciones y funciona a la perfección gracias a la impunidad, la corrupción y la colusión.
Así que en lugar de apedrear todos a Lucero Sánchez, legisladora sinaloense del Congreso local, más bien habrían de poner miles y miles de hombres y mujeres con fuero, sus barbas a remojar.
Acta Divina… La senadora panista Pilar Ortega, secretaria de la Segunda Comisión de Estudios Legislativos de la Cámara Alta, considera una obligación de la legislatura federal retomar la discusión, respecto al fuero constitucional ya que considera que: “No debe haber restricción que impida sancionar cualquier delito de un legislador o funcionario público bajo ese escudo”.
Para advertir… Narco Estado, narco país, narco legisladores, narco gobernantes, narco servidores…
