Permanecer sentado por horas eleva el riesgo de diabetes tipo 2

¡El sedentarismo puede ser más peligroso de lo que imaginas!. Según estudio, si permaneces en tu silla por horas las probabilidades de presentar diabetes se multiplican peligrosa-mente, aun cuando hagas ejercicio.
Científicos de la Universidad de Maastricht, en los Países Bajos, descubrieron que cada hora adicional en una postura sedentaria, ya sea trabajando en la computadora o simplemente descansando en un sillón recli-nable, eleva el riesgo de sufrir diabetes tipo 2 en 22%.
Los expertos recolectaron datos sobre casi 2 mil 500 adultos (con edad promedio de 60 años) que participaron en un estudio basado en la población holandesa. Para calcular el tiempo que permanecían en postura sedentaria, los participantes usaron acelerómetros durante ocho días.
En ese periodo, los investigadores calcularon diferentes factores, como las horas de sedentarismo al día, la cantidad de descansos sedentarios, los periodos pro-longados de inactividad (de 30 o más minutos) y la duración promedio de esos lapsos sin movimiento. También se evaluó el nivel de azúcar en sangre de los individuos. A partir de esta información, los investigadores hallaron que el nivel de glucosa en sangre era normal en 56% de los participantes y elevado en 15%, además de que 29% tenían diabetes tipo 2. «Hallamos que las personas con diabetes tipo 2 pasan más tiempo sentadas al día (26 minutos, en promedio) que quienes no presentan esta condición», declaró Julianne van der Berg, quien se desempeña en el Departamento de Medicina Social en la Universidad de Maastricht. Sin embargo, la especialista advirtió que el vínculo entre estar sentado y la diabetes es solo una asociación, y no prueba que el sedentarismo provoque la enfermedad, es decir, se desconoce aún por qué la inmovilidad tendría un rol en el desarrollo de la citada afección. «No podemos sa-car ninguna conclusión sobre la causas, solo sabemos que cuanto más tiempo pase una persona sentada, mayor es su riesgo de diabetes tipo 2, independientemente de cuánto ejercicio haga», añadió van der Berg. En virtud del elevado número de casos de diabetes tipo 2 a nivel mundial y la gran cantidad de tiempo que la gente pasa siendo sedentaria, estudios como éste son importantes, señalaron los autores del trabajo publicado en el portal de la Asociación Europea para el Estudio de Diabetes (Diabe-tologia).
Por otra parte, el Dr. Joel Zonszein, director del Centro Clínico de Diabetes del Centro Médico Montefiore, en Nueva York, Estados Unidos, advirtió que la posibilidad de sufrir elevado nivel de glucosa en sangre aumenta por distintas razones, no sólo por el tiempo que pasamos frente a la televisión o la computadora.
No obstante, «este es-tudio muestra que para evitar o retrasar la enfermedad, independientemente de la actividad física de alta intensidad, las personas en riesgo de diabetes tipo 2 deben ser conscientes de evitar o reducir la cantidad de tiempo que pasan siendo sedentarias».
Cabe recordar que la diabetes mellitus tipo 2 es condición caracterizada por alta concentración de glucosa en sangre, debido a la incapacidad del organismo para aprovecharla; si no se trata, puede provocar enfermedades cardiacas (del corazón), de los riñones, ceguera y ampu-taciones de las extremidades.
La diabetes mellitus tipo 2 es un trastorno metabólico que se caracteriza por hiperglucemia (nivel alto de azúcar en la sangre) en el contexto de resistencia a la insulina y falta relativa de insulina; en contraste con la diabetes mellitus tipo 1, en la que hay una falta absoluta de insulina debido a la destrucción de los islotes pancreáticos. Los síntomas clásicos son sed excesiva, micción frecuente y hambre constante. La diabetes tipo 2 representa alrededor del 90 % de los casos de diabetes, con el otro 10 % debido principalmente a la diabetes mellitus tipo 1 y la diabetes gestacional. Se piensa que la obesidad es la causa primaria de la diabetes tipo 2 entre personas con predisposición genética a la enfermedad (aunque este no es el caso de las personas con ascendencia de Asia Oriental). La diabetes tipo 2 es controlada inicialmente con el aumento de ejercicio y cambios en la dieta. Si la glucemia no baja adecuadamente con estas medidas, pueden ser necesarios medicamentos como la metformina o la insulina. En los pacientes tratados con insulina, típicamente existe el requisito de revisar rutinariamente la glucemia. Las tasas de diabetes tipo 2 han aumentado notablemente desde 1960, en paralelo con la obesidad. Para 2010 había aproximadamente 285 millones de personas diagnosticadas con la enfermedad en comparación con alrededor de 30 millones en 1985.