Luego de su visita al Hospital Infantil de México “Federico Gómez” y de la misa que ofició en el municipio mexiquense de Ecatepec, el Papa Francisco llegó a la nunciatura apostólica.
A bordo del automóvil compacto en el que salió del nosocomio, el pontífice saludó y bendijo a la gente apostada en las vallas colocadas a lo largo del recorrido en el marco de su segundo día de actividades de su gira pastoral por México.
El jerarca católico bajó del automotor, saludó a algunas personas, recibió obsequios, regaló algunas imágenes y convivió con niños, adultos mayores y enfermos.
Momentos antes de ingresar a la Nunciatura les dio la bendición y les pidió una vez más que rezaran por él. Aunque muchas personas esperaban pacientes una posible salida del pontífice, en un altavoz se dio el anuncio de que el Santo Padre estaba muy cansado, por lo que les pedían atentamente que se retiraran del lugar.